No hables, no te muevas, ni siquiera respires, porque te puede escuchar.
Tu te preguntarás "¿Quién es?", bueno, la respuesta es bastante sencilla, eres tú. Tú eres tu propio monstruo, tu propio miedo, tu propia pesadilla.
Así que ten cuidado, porque en algún momento este monstruo saldrá y no será lo mejor, ni para ti, ni tu alrededor.
JG.