Estaba paralizada, podia sentir mis manos heladas. Mi corazón quería salir por mi boca y mi respiración era de maraton. Intente mirar a otro lado pero era imposible, ahí estaba él, con una bebé en sus brazos, aruyandola y consintiendola, era su bebé, llevaba un lindo vestidito rosa , mediecitas y guantesitos blancos, y un gorrito con orejitas de gato, era tan tierna, la cpoia de su padre. Todo dentro de mi estaba echo trizas, sentí como algunas lágrimas se escapaban de mis ojos
-Hola nena, eres tan hermosa. No puedo creer que estés aquí -Su voz era dulce y en un susurro. Sonreía. -Me tienes tan enamorado, ahora que estas aqui con nosotros todo es perfecto.
Perfecto? Acaso ya me olvido, ya no me extraña, ya la ama a ella?. Sentí un inmenso dolor en mi pecho y me agache un poco apretando mi mano contra mi pecho y cerrando fuerte mi boca para que no me escuchara
-Señorita, esta usted bien? -dijo una de las enfermeras colocando una de sus manos en mi hombro y poniendose a mi altura
-Sí -dije sonriendo. -Solo tengo cólicos
Rio un poco y asintió, me hizo señas para que la siguiera y eso hice. Pase al lado de el y antes de eso coloque mi cabello hacía atrás. Lo tenía muy largo y me lo habia teñido de negro semanas antes de casarme, antes lo tenía gris. Y seguro no me reconocería. La señorita me dejo frente a una de las encubadoras y ahí estaba mi chica, estaba vestida con un precioso y esponjoso vestido amarillo que contrastaba con sus ojos azules, eran idénticos a los de mi madre, y llevaba el cintillito dorado que tad le había regalado. Era de tez blanca, y su cabello era oscuro y abundante... y tenía un gran parecido a mi, podría pasar como mi hija.
-Hola mi amor -La tome en mis brazos y acaricie su diminuta nariz con la mía, su manita se posó en mi boca y reí para luego darle un beso. Empece a aruyarla y a cantarle muy suave para que stephen no me escuchara. Estaba muy feliz de estar en el mismo lugar que él, pero a la vez, destrozada. Para colmo su hija y mi hermana habían nacido el mismo día
Genial, ahora cada vez que leila cumpla años recordare a .... su hija.
-Ay mi niña, como quisiera que esto no fuera así, no me arrepiento de tenerte paran nada, pero si ella estuviese aqui con nosotros... se que la amarias, como ella a ti. Te amo tanto mi pequeña brit.. -escuche muy suave como hablaba con su hija, esperen què, su hija tenía mi nombre? acaso le hablaba de mí? Dios mío!!
Leila empezó a llorar cuando deje de cantarle haciéndome poner muy nerviosa, la cargue como si nunca hubiese cargado un bebé lo que la hizo enojar más, la puse en distintas posiciones mientras la aruyaba con prisa, pero todo era en vano. Vi de reojo con stephen reía y colocaba a su ángel en una de las encubadoras
Después de todo somos hermanas, y ya comenzamos a tener problemitas no.. Genial hermanita -pensé
-Te ayudo -vi como sonreía, el tenía la vista puesta en mi hermana, yo extendí un poco mis brazos mientras miraba horrorizada a mi hermanita dandole a entender que podía tomarla, la tomo cuidadosamente y comenzó a arruyarla, y al cabo de unos minutos la ingrata calló.
Donde habia aprendido todo esto, de que me perdí! Era tan perfecto lo que veía, mi piel se erizaba cada vez que stephen sonreía mientras miraba a leila, miles de recuerdos venían a mi cabeza mientras quedaba aun mas embobada al mirarlo, sus perfecto brazos sostenían el delicado cuerpecito de mi hermana como sostuvo el mio alguna vez.... que, era enserio.. no se si decir que mi hermanita tenia buenos gustos o me lo queria robar, el rio fuerte pero dulce a la vez para no asustarla. Leila habia sonreído por primera vez y había sido por él
-Es preciosa, podría ser la mejor amiga de mi hija, pero sin duda también podría esperarla 18 años. Al fin y al cabo solo le llevare 25 años dijo gracioso
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Siempre Tuya
RomanceSolo quería estar entre sus brazos y nunca soltarlo más, no se si me estaba arrepintiendo de mi decisión.... -Hija, de nuevo pensando en él cierto- su calida mano acariciaba mi cabello -Si mamá, no se si algún día dejare de amarlo.... - Ay cari...