Reto 10 Stories

Mirror

La madre de Woohyun había falleció hace dos días, al funeral no había asistido nadie, solo nosotros dos y dos amigos nuestros. Tenía cáncer, hace a penas 6 meses se lo habían diagnosticado, pero era tarde, desde el primer momento se lo habían dicho y desde entonces Woohyun y ella no se habían separado un solo momento.

- Woohyun, quieres que pida de comer o puedo cocinar algo... - pregunte entrando a la habitación.

Woohyun estaba recostado de lado en la cama, solo podía ver su espalda pero sabia que de sus ojos salian lágrimas y me dolía tanto verlo así.

- no, gracias... me duele el estómago. - contesto en voz apenas audible.

Suspire, fui hasta la cama, entre por debajo de las cobijas y toque su hombro.

- sabes que estoy aquí para ti, no tienes porque pasar por esto solo, te amo y si algo te duele a mi también.

Bese suavemente su hombro cubierto por la cobija, el se giro y me abrazo por la cintura escondiendo su rostro en mi pecho y comenzó a llorar. Tratando de consolarlo sobaba su espalda.

- Sungkyu, estoy bien, es solo que no puedo aceptarlo, mi pecho duele, siento que el aire que respiro no es suficiente, no puedo estar... estoy solo, no tengo a nadie, ella era todo... ahora quien me aconsejara, me siento abandonado...

Yo no podía comprender como se sentía, a mi nunca me había pasado algo así, yo ni siquiera era cercano a mis padres, pero el si lo era con su madre, su padre los había abandonado cuando tenía 5 años, no lo recordaba y desde ese entonces su madre había trabajado para poder mantenerlo, darle estudios y una vida sin carencias.

- me tienes a mi, yo jamás me separaré de ti, debes aferrarte a mi.

- yo se que saldré de esto, pero no se como vivir sabiendo que no puedo ir a visitarla o llamarle cuando quiera...

Después de varios minutos llorando sobre mi pecho, Woohyun se quedó dormido. Solo me quedé sosteniéndolo entre mis brazos. Yo también quería llorar, llorar de impotencia porque no podía hacer nada por él, solo me quedaba verlo llorar y tratar de consolarlo...

Pasaron los días y Woohyun iba peor, no comía, solo dormía o lloraba, su color de piel ni siquiera el mismo, estaba adelgazando y yo moría junto con él.

Woohyun estaba recostado en el sillón viendo hacia la ventana con nostalgia, le había preparado un té y lo lleve hasta donde él estaba.

- es de manzanilla, tu favorito. - dije sentándome a su lado.

Woohyun aparto la mirada de la ventada y me miro a los ojos. 

- gracias. - susurro y pude ver como sus ojos no tenían ese brillo que tanto amaba, sus labios estaban resecos y sus mejillas no eran rosadas.

Me senté junto a él y tomé una de sus manos entre las mías, estaba helado, era invierno y apenas traía un suéter. 

- te traeré una cobija, estas helado.

Fui hasta nuestra habitación y tome una cobija del clóset, cuando regresé estaba en la misma posición y viendo hacia la ventana. 

- ¿te gustan mucho las ventanas en general o solo es esa?

Woohyun hizo una mueca algo parecido a una sonrisa, y en lugar de alegrarme fue como una puñalada en el estomago, tenia miedo, porque el ya no era nada parecido a lo que una vez fue. sus sonrisas iluminaban los días nublados y esta solo hizo que me dieran ganas de llorar.

- ¿ya terminaste tu té? - pregunte colocando sobre sus hombros la cobija que había traído.

- no, pero ya casi.