Capítulo I- Transtornos

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El agua recorría la ventana de Amina, el húmedo rastro que estas dejaban la relajaban mientras su gato negro se frotaba contra su pierna, exclamando su atención, sin embargo Amina no podía pensar en otra cosa más que en aquellas gotas; las veía tan iguales pero sabía que su interior eran diferentes, ella lo sabía pero no lo quería creer, ¿Por qué algo tan igual puede ser tan diferente? Ella lo repasaba en su mente, no cómo una curiosidad, más bien cómo un doloroso recuerdo.

Amina decidió seguir una gota con su dedo; la razón de ello es que en su interior contenía una hormiga que probablemente luchaba por su vida ignorando que seguramente era su fin, la hormiga movía sus pequeñas patitas pensando que lograría salir de ahí.

Amina la tapo con su dedo unos segundos y cuando por fin lo quito, no encontró a la hormiga con esperanzas de salir de aquella gota, sino una hormiga inmóvil. Ella, rió un poco cruel, pero se identificaba con la moribunda hormiga.

Amina decidió levantarse de una vez cuando su gato maulló con desesperación, se dirigió pensante en la cocina con la misma pregunta “¿Por qué algo tan igual puede ser tan diferente?” Y aunque mil ideas se le venían a la mente no lograba descifrar la respuesta, “Es un acertijo” se reto a ella misma.

Abrió el refrigerador algo distraída y saco un rollo de jamón, lo colocó en el piso y llamó a su gato:

—Ader, ven a comer, anda.
El gato al escuchar la voz de su ama llamándolo por su nombre, corrió de inmediato resbalando al intentar frenar, devoró el jamón para después  lamer el piso, sin dejar rastro de que alguna vez hubo algo ahí, Amina se limito a sonreír, sin embargo sus ojos no expresaban lo que su boca.

—Ader, que harías sin mí, probablemente estarías solo— Amina lo acaricio mientras decía esas palabras con un significado distinto.
Ella camino a la sala con la delicadeza que la distingue, algunos movimientos lentos en las manos mientras daba vueltas, cómo si bailara con el sonido de las gotas chocando contra sus ventanas, pero en su mente era distinto, el golpeteo suave contra la ventana, se transformaba en el agitar violento de una puerta, cómo si alguien desesperado estuviera tras ella; pero a Amina le emocionaba el recuerdo distante de aquella puerta, el sentimiento de jamás verla, nunca más.

—Ader, baila conmigo, vamos, cómo lo hacíamos hace 1 año, ¿Recuerdas?

Ader se acostó sobre su pie, ronroneando, consolándola, pero… ¿De qué exactamente?

Amina se lanzo al sofá mirando al techo, con su actitud infantil movía sus piernas y se ponía a imaginar mil y un cosas, cosas hermosas, sublimes, que ella sólo podría entender, como el canto de una tortuga o el viento golpeando contra hermosos campos de trigo, e incluso un manatí en una montaña, parecería una locura, pero a ella, ella sabía el porqué de esas cosas, la belleza, en lo que nadie más comprendería.

El celular de Amina sonó, haciendo que esta se sobresaltará, en su cerebro algo hizo click, cambiando completamente.

—Amina Romero ¿Quién habla?— Respondió grave y seria, en un segundo desapareció la voz tierna y dulce.

—Amina, te necesitamos en la oficina, ya— Amina reconoció la grave y vieja voz de su jefe.

—Voy para allá— Colgó y se levanto rápidamente dirigiéndose a su habitación con un paso seguro y firme, mirando siempre de frente, su postura totalmente recta y sus labios antes alegres ahora eran una línea recta sin expresión, sin embargos sus ojos demostraban lo contrario.

De la mitad derecha de su armario saco su traje del trabajo, una corbata y sus zapatos negros. Coloco cómo si ya fuera una rutina su camisa blanca la cual abotono, se dirigió a su saco para colocárselo y doblar el cuello, deslizo su mano por este para plancharlo un poco, se sentó en su cama preparada para ponerse sus pantalones de vestir azul marino, al igual que sus medias negras y por último sus zapatos color vacío.
Se miro frente al espejo, seria, arreglo su corto cabello alisándolo con la palma de su mano un poco, coloco un pasador tomando su flequillo, colocó un poco de maquillaje en su cara, sonriendo para sí misma, para volver a su seria personalidad.

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⏰ Última actualización: Jun 09, 2018 ⏰

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