||| Te conocí en un sueño Mágico ||||

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-Podrías dejar de molestarme- advirtió provocando una risa por parte del menor de cabellos marrones.

-ay! vamos déjese querer- alzó los brazos buscado afecto por parte de su mayor, recibió un golpe en su cabeza asiendo que el menor soltara un quejido. - oye, eres enano pero peligroso... - el mayor le dirigió una mirada frunciendo el ceño, le menor levanto ambas manos en señal de rendición.

-no tienes remedio- negó con la cabeza- jungkook

-no me lo tienes que repetir a cada rato- llevo sus manos a las caderas con el ceño fruncido.

Jungkook es un amigo que trabaja en un café como camarero, se conocieron hace ya unos meses. La verdad la primera impresión que tuvo jimin fue.... comelon. Lo descubrió comiéndose una galleta de la vitrina, cuando se dio cuanta que Jimin lo observaba se coloro hasta las orejas. Después de eso, jungkook lo atendió, y le pidió que no lo delatara. Desde ese momento fueron conociéndose un poco más.

-oye ChimChim..- llamo el menor tomando asiento enfrente del, y si se pregunta de porque se sienta y no atiende a los demás clientes. Es jueves y en ese día no hay gente, el mayor miro al de ojos oscuros después de darle un sorbo a su café.- ¿como estas?

-de maravilla... - quiso darle un sorbo a su café, pero una bolita de papel con saliva llegó hasta su frente- ¡¡¡JUNGKOOK!!! - tomo una servilleta para quitarse la bolita con la saliva de su amigo- ¡si me contagio de tu retraso, será tu culpa! - enfadado miro a su amigo, este tenía el ceño fruncido.

-ayer te encontré caminando por la calle, estabas que te desmayabas, era casi de noche y un golpe en tu estómago...- hizo una pausa- ¿y me vienes a decir que todo estás "de maravilla"?- hizo otra pausa para ver a el rostro de su amigo, este desvío la mirada y sus manos estaban sobre la mesa jugando con estas.

Suspiro

Ayer fue un pésimo día... bueno casi todos los días es un pésimo día, después que salió de su universidad espero en la parada del autobús, pero no llegaba y se estaba oscureciendo. El había decidió ir a pie, no hizo ni diez pasos y ya se estaba desmayando en plena calle, fue en ese momento que cierto chico lo subió a su auto y lo llevo a su casa. Su madre le mando un mensaje que llegaría tarde, por lo que le alivio bastante. 

Jungkook se quedó en su casa un rato para acompañarlo, Jimin no le quizo explicar de porque se encontraba con ese golpe en su estómago.

Maldecía por dentro, la verdad lo que más le molesta es el hecho de no saber cómo defenderse. Físicamente el no es delgado, si tiene un poco de musculatura, pero la verdad el no es muy fuerte que digamos.

Y el odia eso

Agradece tener un amigo como jungkook, tal vez si el no hubiera pasado por esas calles. El estaría muerto probablemente.

-Jimin- el nombrado dirigió su mirada al frente, su amigo lo miraba preocupado, un nudo se le hizo en la garganta. Jungkook está al tanto de lo que pasó entre su  "amiga" y el, pero este no está enterado de los constantes maltratos hacia su persona.- dime lo que pasa.... - lo miró serio, el mayor suspiro con pesadez.

(...)

Durante toda la tarde, Jimin le contó sobre los golpes y mensajes, este le dio una impotencia horrible. Jimin jamás había visto a su amigo tan molesto, siempre era alegre y estupido.

-¿por qué no me lo dijiste antes? - preguntó ya calmado, Jimin negó con la cabeza.

-no quería que te involucraras en esto - dijo sincero, el menor suspiro agachando un poco la cabeza. La volvió a levantar y miro fijo al pelirrojo; Jimin ladeó la cabeza un poco.