|7|

2.6K 353 104
                                    







Pov Narradora


-¡¿nuestro que!?- definitivamente deseaba haber escuchado mal

Él chico frente a el tenia una mirada indescifrable, con esa petulante sonrisa y esa expresión de "con solo un chasquido obtengo lo que quiera", todos callados, si antes la situación era incomoda esta lograba haber que Seokjin deseara estar en las profundidades del mar, " al menos ahí no tendré ninguna preocupación" pensó él pelinegro

-yo- él mayor de los Jung comenzó, parecía pensar lo que estaba por decir -lo lamento, no tenia idea de que no estabas al tanto sobre el acuerdo- mostró cierta sinceridad en su rostro, sinceridad que a Jin le valía un pepino

-Seokjin- lo llamo la autoritaria voz de su padre -pensaba decírtelo en el transcurso de la cena, pero debido a tu escena creo que es mejor ser directo-

-veras querido, él señor Jung y tu papá quieren mhh ¿como decirlo para que lo entiendas?- dijo su madre -unir las compañías de ambos y ya que tu todavía no tienes pareja pensamos que la mejor forma de unir lazos es con un matrimonio- intento sonar lo mas apacible para que la noticia no abrumara al omega, vaya tontería

-no puedo creer que estén metiendo MI futuro en sus estúpidos negocios- escupió él menor dando una mirada de muerte al pelinaranja frente a el, este solo le devolvió una mirada ¿despectiva?, no sabia como catalogarla

-¿que clase de lenguaje es ese para un omega?- reprendió su padre severamente

-esta bien señor Kim, ¿me dejaría hablar a solas con Seokjin?- preguntó él alfa mas joven levantándose de su asiento ante las sorprendidas miradas de los presentes

-claro, pueden hacerlo en mi despacho- ofreció él canoso hombre

A regañadientes y con unas ganas inmensas de reclamarle a quien sea sobre la ridiculez de la que se acababa de enterar Seokjin se levantó siguiendo desde atrás al alfa, subieron las escaleras y después de que él mas alto caballerosamente le abriera la puerta ambos entraron, él menor estaba a punto de hablar cuando unos fuertes brazos lo tomaron de la cintura y lo jalaron hacia un fuerte y ciertamente cálido cuerpo

I'm not your toyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora