– ¡Charlotte! por enésima vez llegaras tarde al colegio–. Llamo Ángela desde el pie de las escaleras
Resople tras escuchar la insistencia de dicha mujer, habíamos llegado hace dos días a la ciudad y muy a mi pesar tendría que comenzar desde cero otra vez, mis padrastros se habían separado al darse cuenta que su matrimonio no tenía futuro y aunque yo amara a ambos no existía una relación de padres e hija puesto que me habían adoptado en la entrada a la adolescencia
–Ya me voy no grites más por favor–. Acomode mi mochila sobre mi espalda mientras le daba un beso en la mejilla –Te quiero.
El frio aire que enredaba a la ciudad me dio de golpe sobre la cara al apenas abrir la puerta, metí las manos en los bolsillos de la chaqueta mientras caminaba en dirección al colegio que no quedaba muy lejos de casa o eso había dicho Angie, la cuidad tenia un aspecto triste y los montes y arboles que adornaban los bordes del lugar no ayudaban en mucho. Un par de minutos después por fin llegue al colegio, las viejas paredes y el aspecto descuidado de los alrededores me recordaba de cierta forma al orfanato donde viví
Con algo de temor busque la oficina del director hasta poder encontrarlo gracias al llamativo letrero.
DIRECTOR NICOLAS DANIELS
Toque suavemente tres veces antes de escuchar la gruesa voz dándome la autorización, cerré la puerta detrás de mí al momento que veía al hombre de avanzada edad revisando unas hojas que yacían en el interior de una carpeta negra.
–Buenos días señor director–. El alzo la mirada mientras sostenía sus lentes de lectura –Soy Charlotte Azuara ¿quería saber si es posible entregarme un horario oh algo así? no comprendo nada de cómo se manejan las cosas en este lugar.
–Buenos días para usted señorita Azuara, efectivamente tengo aquí su horario junto a su plan de estudios y la combinación de su casillero–. Extendió un sobre amarillo del tamaño de una hoja –Espero que pueda sentirse a gusto en nuestras instalaciones y bienvenida a bordo.
–Por supuesto que sí, gracias–. El hombre formo una muy pequeña sonrisa mientras que asentía con la cabeza al observarme salir de ahí
Con algo de confusión busque mi taquilla y saque los primeros libros que necesitaría para la primera parte de clases. Literatura, marcaba aquella hoja así que sin más me dirigí hacia la clase sin saber precisamente donde estaba. El profesor aún no había llegado lo que me permitió ubicar un lugar disponible para mí encontrando el adecuado junto a una solitaria chica
–Hola–. Llame su atención mientras me detenía a un lado de la banca – ¿está ocupado? ¿Podría sentarme aquí?
–Si claro.
Entonces me acomode a su lado mientras sacaba una bitácora y unas cuantas plumas, por un segundo recordé lo que hacía en el orfanato y como aquellos años quedarían marcados en mí para siempre
El profesor entro al salón dejando su maletín sobre el escritorio, se dedicó a observar a la clase y sonrió al verme
–Buenos días chicos el tema de hoy es la poesía pero primero que nada quiero que le den la bienvenida a su nueva compañera, ¿Charlotte, cierto? –. Asentí en respuesta
Todos comenzaron a saludarme de manera desordenada y así fue como la clase comenzó, durante el trayecto de la clase cruce algunas palabras con aquella chica así que al terminar decidí presentarme correctamente.
– Por cierto, no me has dicho cómo te llamas.
– Oh perdón así traeré la cabeza–. Rio por lo bajo, me extendió la mano que al mismo tiempo tome –Rachel Beaumont un placer.
–Charlotte Azuara y lo mismo digo.
Claramente la situación la divirtió porque rio levemente, tome la hoja de mi horario y seguía biología. Hice un gesto de desagrado con los labios pues la materia simplemente me aburría.
– ¿Qué clase es la que tienes?
–Biología.
–Oh, entonces tenemos distinto horario.
–Supongo que sí, no conozco mucho de este lugar solo lo que alcance a encontrar en el internet–. Me puse la mochila sobre un solo hombro mientras me dirigía a la puerta con ella siguiendo mis pasos
–Si quieres podemos comer juntas–. Comento al detenernos en la puerta, asentí presionando los labios –ok, te veo en la entrada del comedor.
Ambas tomamos una dirección diferente y con un poco de ayuda pude llegar al salón correcto, el lugar estaba casi lleno y sobraban algunos lugares pero como me gusta estudiar sola casi siempre elegí la que estaba completamente vacía al fondo
Como les había mencionado con anterioridad la materia me parece aburrida por lo que la siguiente hora fue completamente un fracaso y la que seguía mucho más, solo me quedaba esperar paciente por el sonido del timbre indicando el descanso.
Rachel me empujo lentamente mientras ingresábamos al comedor del lugar, era mucho más pequeño de lo imaginado pero lo suficiente para que la cuarta parte de estudiantes entrara. Había muy pocas mesas disponibles por lo que Rachel me dijo que eligiera una mientras ella iba por la comida, elegí una junto a la pared
Después de una corta espera mi compañera ya estaba con nuestros almuerzos frente a nosotras, mi mirada se desvió al solitario lugar que yacía entre las dos esquinas con una excelente vista por las ventanas.
–Ese lugar esta genial ¿Qué te parece comer allá?
–No–. Dijo en seco –Esa mesa solo es para ellos así que sigue mi consejo y no ocupes jamás ese lugar.
– ¿De quienes hablas?
–De los Maslow, una de las familias más ricas y misteriosas de este lugar.
Aun cuando la curiosidad me carcomia con un asentimiento de cabeza di aquella conversación por terminada.
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NUEVA VIDA
VampireLa vida de Charlotte jamas fue normal, despues de pasar casi toda su vida detras de unas frias y obscuras paredes que rodeaban el orfanato su vida parecio tener un reinicio al ser adoptada por un joven matrimonio, pero esto se pone a prueba una vez...