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Lee Chae Lin, es mi nombre.
Y ahora después de mucho tiempo podré sentirme una persona útil y normal.
Verás, mi padre es el CEO de una empresa millonaria con socios mayoritariamente en China.
Siempre ha sido egocéntrico pero muy sobre protector, nunca quizo verme trabajar a pesar de que le rogué en múltiples ocasiones.
En fin, ya tengo trabajo, en una pequeña y nueva cafetería que mi madre puso, si, ella es el CEO de la cafeteria.
Pero se irán un tiempo a vivir a Hong Kong por lo que me dieron autorización para encargarme de la cafetería. No es grande ni muy conocida, está en un barrio normal donde va gente normal, es perfecta.
Después de varios anuncios sobre el trabajo en dicha cafetería por fin unos chicos se presentaron a la entrevista de trabajo que yo misma planee.

-¡Buenos Días! Vengo por el trabajo, mi nombre es Kim TaeHyung, soy estudiante y busco turno vespertino ¿Se podrá? -Entró al pequeño, pero muy elegante lugar.

-¡Buenos días! ¡Sí! ¿Te parece un horario de 3:00 pm a 9:00 pm?-

Nos pusimos de acuerdo los dos y fué contratado para trabajar mañana mismo. También una linda muchacha llamada Lee Ha Yi se unió al personal en horario matutino. Yo obviamente estaría con ambos todo el tiempo.
Todo parecía de acuerdo a mis expectativas, sin algún error que los dañara. Después de unas semanas de haber comvivido con ambos chicos ya nos sentíamos lo suficientemente cercanos como para decir que éramos amigos. Y así éra.
Recuerdo como si fuera hoy, todo lo que pasó...
-¡Buenos Días Unnie! Perdón por llegar algo tarde, es que hubo una especie de manifestación por una empresa que quiere quitar el terreno agricultor de los pueblos, y obviamente bloquean calles y el bus tardó más. -Rió y se adentró para saludarme y ayudarme a preparar todo el restaurante antes de abrir.

-¿Qué? ¿Cómo no me enteré de nada? Son... -Miré el reloj en la pared. -¡Son las ocho! Estoy aquí desde las 5am y no he visto nada sobre éso ¿Me estás mintiendo Ha Yi? -Me crucé de brazos finjiendo seriedad y autoridad.

-¡Claro que no Unnie! ¿No has visto las noticias últimamente? Es más... Creo que ya están, mira...-Busca y encuentra el control de la televisión que había en el local y la prende en el canal de noticias.

"La población de Seúl y varias ciudades como Gangnam, Busan y el pueblo de Goesan se únen a las manifestaciónes a favor del pueblo Boseong, quienes se enfrentan a una empresa que ya está demoliendo la cocecha del terreno vendido a éstos. Se desconoce el origen de la empresa y su objetivo, sin embargo estaremos informando de cualquier cosa dicha por ésta industria. Por otra parte el secretario de salud...."

Ha Yi volteo a verme victoriosa y no me quedó otra opción que aceptarlo.
-Está bien, tú ganas, POR AHORA...-

No sabía lo jodidamente importante que éra ésa simple noticia. Incluso hoy, sigo recordandolo sintiendo la impotencia de no haber hecho nada antes.

Pasaron meses y por fin se anunció que las manifestaciónes habían terminado. Pero ahora ocurría un grandísimo problema.
Comezaron a haber desapariciones extrañas y secuestros sin rastro de la gente desaparecida. Ni siquiera había un requisito, TODOS podían desaparecer, pero ¿Porqué? ¿Y quiénes hacen ésto?

No lo supe hasta ahora.

'5:00 Am' y yo despierta rumbo al local con varias bolsas y cajas con alimentos para la cafetería.
Mi camioneta era lo suficientemente grande para almacenar todo éso.

Cuando llegué me aseguré de no ver a nadie al rededor por seguridad más que nada. Quedé con Ha Yi de vernos a ésta hora sin embargo no llegaba.
Me imaginé que se había quedado dormida aunque no es seguro...

Entonces después de dar dos vueltas para llevar las cosas dentro miro a lo lejos a Ha Yi, pero es interrumpida por una camioneta y hombres que forcejean con ella a tal punto que la hicieran gritar.
Su mirada, sus ojos mirando desesperadamente los míos esperando a que hiciera algo.

Mi padre siempre me dijo que en ocasiones como ésta le llamara a él, porque la policía se maneja con dinero y no harán nada por la gente que no puede dárselo.
Le hice caso, lo llamé y corrí la puta suerte de que me contestara.

-¡Papá! -Exclamé en voz baja escondiéndome tras mi camioneta. -Necesito tu ayuda, se la van a llevar, se van a llevar a...- Y me miraron. Corrieron hacia mí y como pude entré a la cafetería encerrandome en la cocina de ahí. Mis piernas temblaban tanto como mis manos. Quería y necesitaba llorar pero en ése momento no podía.

-¿ChaeLin? ¿Qué estás diciendo?

-Por favor, me van a llevar papá ¡Por favor haz algo ya... Tienen cubierto su rostro, están de blanco, llevan guantes. Diles éso a la gente... ¡Diles!-
Escuché los golpes en la puerta y aventé mi celular debajo del refrigerador. El miedo me hizo retroceder hasta quedarme congelada en la pared mirando la puerta sin saber qué hacer.
Lo lograron, incluso si lo intenté, ellos me llevaron, luché todo lo que pude aunque al final me durmieron.
Y desperté desnuda amarrada en una especie de camilla con cristal para no dejarme levantar, tenía todo tipo de cables conectados a mi piel.
No sabía dónde estaba, pero estaba lleno de doctores observando como reaccionaba.

¿Cuanto tiempo estuve dormida?

AONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora