Cicatrices - Flozmin

Capítulo 5

Jazmín bajó de su auto y se dirigió hacía la casa

Tocó la puerta una, dos, tres veces hasta que esta por fin se abrió dejando ver a una morocha ya vestida con ropa de entre casa mirándola con el rostro serio y confuso a la vez

- Qué haces acá?

Flor habló seca con su mirada trasmitiendo una mezcla de dolor y enojo

- Necesito hablar con vos, puedo?

Flor la miró unos segundos hasta que se hizo a un lado dejándola entrar, su rostro seguía igual y no entendía muy bien que hacía su jefa allí, de seguro esta era una de las situaciones más extrañas que había vivido

Jazmín ingreso a la sala esperando que Flor le de una señal de qué hacer, esta cerro la puerta y fue hasta el sillón sentándose

La castaña la miro por unos segundos y se acercó sentándose a su lado

- Flor yo..-

- No entiendo que haces acá Jazmín

Flor mantenía su mirada baja jugando con la tela de sus pantalones

- Vine porque no te podía dejar así

- Yo ya estoy acostumbrada a estar así Jazmín

- Así cómo? Rota?

Flor levantó la vista y se encontró con esos ojos verdes mirándola fijamente, volvió a bajarla y habló

- No tendrías que haber venido -respondió evadiendo su pregunta

- Pero ya estoy acá, y no me pienso ir sin saber aunque sea algo mínimo de vos.. Flor tenes que entender que yo lo único que quiero es ayudarte

La morocha se acomodó en sillón y levantando su vista se la quedo mirando unos segundos

- Por qué? Por qué te importa tanto mi vida? Si me pasa algo es problema mío

Jazmín la observo en silencio tratando de encontrar ella también una respuesta a esa pregunta

- No se, tal vez sea porque desde que te conocí sentí algo adentro mío, que no tengo la menor idea de que es pero que no me había pasado con nadie

Flor la miró sorprendida y algo tímida, no esperaba escuchar esas palabras, de hecho penso que la castaña no iba a tener nada para responder

- Flor por qué te cuesta tanto abrirte conmigo?

La morocha seguía en silencio con su mirada gacha sintiendo un fuerte nudo en el pecho y en su garganta

Jazmín la miraba con tristeza queriendo abrazarla pero con miedo a ser rechazada

- Flor..

- Yo no te conozco Jazmín

- Ni yo a vos, pero en estas semanas me pude dar cuenta de que sos una persona hermosa, pero estas lastimada.. y yo no se por qué estas así pero si vos me dejas yo voy a hacer todo por ayudarte

- Yo no te pedí ayuda

- Pero yo me di cuenta que la necesitas

Flor seguía con su mirada pérdida en el suelo, sintiendo sus ojos húmedos amenazando con que lágrimas se escapen de ellos en cualquier momento

- A qué le tenes miedo flor?..

Jazmín habló suave, mirándola atentamente

Largó un suspiro luego de unos minutos sin ninguna respuesta de la morocha

La miró por última vez y se paró con cierta decepción y tristeza, iba a tomar sus cosas cuando flor habló

- No.. no quiero que me vuelvan a lastimar

Su voz salió algo rota mientras las lágrimas caían por sus mejillas sin parar

Jazmín se detuvo en seco al escucharla, volvió su vista a ella y al verla llorando, tan rota, tan pequeña no pudo hacer otra cosa que sentarse a su lado y abrazarla con fuerza

Flor estaba con su cuerpo hacía delante con sus manos en su rostro queriendo evitar su llanto tan fuerte pero era en vano, jazmín la abrazaba de costado haciendo caricias en su espalda y en su cabello, cerrando los ojos queriendo transmitirle tranquilidad a la morocha

- Confía en mi flor.. yo no te voy a juzgar, no te voy a lastimar

Le dijo chiquito al oído

Flor salió de entre sus brazos y la miró, tenía la cara roja por el fuerte llanto, sus mejillas estaban empapadas de lágrimas y su flequillo estaba despeinado

Jazmín seco sus lágrimas con sus pulgares y acomodó su flequillo desprolijo

Se paró y fue hasta la cocina buscando un vaso con agua, abrió la heladera y quedó paralizada unos segundos observándola y viendo que no había casi nada allí, solo agua y algunas frutas

Quedó con la puerta abierta observando, Florencia no parecía una persona que sufriera problemas financieros así que descargo esa idea al instante, fruncio el ceño cuando algunos pensamientos pasaron por su cabeza pero inmediatamente intentó borrarlos también

Sacó el agua, la sirvió y se dirigió hasta el sillón nuevamente

- Toma, te va a hacer bien

Flor tomo el vaso algo tímida y con su cuerpo temblando levemente, tomó unos sorbos de agua y dejó el vaso sobre la mesita que había allí

- Estas mejor? -la morocha solo asintió- flor.. yo no te quiero apurar, solamente quiero ayudarte para que estes bien, si hago todo esto es porque me preocupo por vos

- Gracias -respondió con vos chiquita

Jazmín acarició su mejilla y vio como los ojos de flor empezaban a soltar lágrimas nuevamente

La abrazo dejando su cabeza sobre su pecho acariciándola con amor en silencio

Flor no supo bien por qué pero sentía que podía confiar en ella, algo dentro suyo le decía que se abra con la mujer que la estaba abrazando como si fuera la cosa más preciada del mundo

La morocha solto un suspiró cuando su respiración se calmó y se sintió tranquila entre los brazos de la castaña

De un momento a otro y casi sin pensarlo habló

- Yo.. -cerró sus ojos con fuerza con miedo pero Jazmín siguió acariciándola haciéndole saber que ella estaba ahí - yo sufro de problemas alimenticios..