Meditaciones

Perdón.

Quiero pedir perdón a todas las personas a las que les he fallado.
Perdón mamá, por no haber sido más fuerte.
Perdón papá, por haberte decepcionando.
Perdóname hermano por dejar que cayeras.

Pero ¿Qué más podía hacer?
¿Qué más podía hacer con todo ese dolor que cargaba? Con toda esa tristeza que tenía, con esa soledad.
¿Qué más podía hacer, si tú ya no estabas aquí?
¿Que más podía hacer si sólo buscaba una manera de salir? Una manera de sentirme vivo.
Pude haber hecho las cosas diferentes. Pude haber sido la persona con la que soñaba y no a la que le temía.

Y sabía que pasaría. Pero jamás pensé que tú serías la persona que lo haría.
A ti no pude decirte que no. Jamás pude.

Ahora volamos los dos, sabiendo que no llegaremos a ningún lado. Pero eso no importa. Aún así lo hacemos.

Volamos para olvidar nuestros problemas, pero el volar se ha convertido en nuestro mayor problema. 
Volamos para evitarnos a nosotros mismos y cuando bajamos no soportamos la idea de lo que implica volar. Entonces, volamos...

Quisiera sólo regresar el tiempo con todo este conocimiento y manera de entender el mundo que tengo ahora. Pero nada viene gratis en la vida. Y las mayores recompensas las protege el peor de los dragones.

Pero ahora es muy tarde. Esto me consume y me mata poco a poco. Y lo peor es que sigo ahí. Atrapado, encerrado en el hábito. En el vicio. En la adicción.