-Uno.

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La gente grita, hay sangre por todos lados.
El espacio en el que Niall y yo nos encontramos es tan reducido que apenas me permite respirar.

Una lástima inmensa crece en mi interior al ver a otro chico caer en el ring.

-¡Y ahora, con ustedes. El chico más violento de la ciudad! ¡Del universo! ¡"DUNK"!

El público grita alborotado y se empujan entre ellos para poder admirar al hombre.
Cojo el brazo de Niall para no perderlo, mientras él grita como loco junto con los demás.

El timbre suena y pocos segundos después golpes y gemidos de dolor se unen.

No soy capaz de levantar la vista para ver como van.
Ladeo la cabeza en dirección de mi amigo y soy capaz de observar sangre en su camisa.
Un escalofrío baja por mi columna e inhalo con fuerza.

-¡Lou! ¡Tienes que ver esto, éste alfa es el mejor! ¡Está como quiere!- toma mi mentón y lo inclina arriba.

El contrincante del hombre que me da la espalda, está tirado bañado en su propia sangre y seguramente ahogándose con ella.
El olor me llega y no sé si soy capaz de guardarlo dentro de mí.

El árbitro toma la mano del ganador alzándola al aire y lo gira lentamente.

Entonces, solo entonces, soy capaz de entender la inquietud de todos los omegas y betas en éste lugar.

Soy capaz de observar sus rizos en una despeinada coleta, la cual ahora seguramente está mojada por aquél sudor. Sus ojos esmeralda recorren a todo el público con una sonrisa demoniaca. Un hilo de sangre corre por su cejilla derecha. Sin embargo, parece ser que todo en él está bien. Soy simplemente capaz de ver todo.

Sus bíceps están moldeados de una forma tan perfecta, que me es imposible preguntarme como se sentirán.
Gotas de aquél líquido saldo lo barren, pero aún así, parece el ser más perfecto que mis ojos hayan visto.

Me quedo boquiabierto al ver algo tan hermoso ahí arriba. Parpadeo varias veces, y sé entonces que no estoy soñando.

Soy consciente de que Niall lo notó.

Y también, soy plenamente consiente del tirón que siento dentro.

No. Puede. Ser.

Volteó a mirarlo con incredulidad y él sonríe.

-Es Harry Styles.- me dice con una chispa de emoción en su tono.

Así que el nombre del Dios es Harry Styles.

∆Lazo Inquebrantable∆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora