Todo lo que conocía de la vida era Tucson Hills un pueblo de 1300 habitantes, el barrio Clayton mas conocido como el barrio de las promesas como le decía la gente, ya que en ese barrio estaban los más ricos, talentosos y selectos del pueblos, era un barrio de los hijos de los fundadores, casas amplias, con jardines, todas ubicadas al rededor de una rotonda que era usada como plaza en la cual jugué toda mi infancia, todas con balcones imponentes, en tonos blancos, y tejas negras, patios y jardines inmensos, demasiado pretencioso para mi gusto.
La gente lo solía llamar así porque hacían un contraste muy grande con respecto al pueblo, un pintoresco pueblito en el que todos se conocían, casas de una planta, simples pero lindas, un centro pequeño con tiendas con techos de dos aguas y tejas, vidrieras chicas que exponían sus productos, la gente tenía respeto por los que vivíamos en mi barrio, curiosidad ya que nadie más que no sean los que vivíamos allí teníamos acceso, claro salvo con una invitación previa por algún propietario, Nos veían como celebridades, algo de lo cual yo estaba completamente en contra y trataba de familiarizarme y mostrarle que todos éramos iguales.
Todos apostaban por la nueva generación en la cual yo estaba incluida, mi familia era una de las más renombradas , dueños de una cadena de electrodomésticos, que no solo los vendía sino los fabricaba, esta marca se distribuía por todo el país y países cercanos, pero su sede principal se encontraba en Tucson hill, lugar de nacimiento de mis padres los cuales consideraba completamente necesario mantener sus raíces por eso jamás habían trasladado la sede principal a la cuidad, tenían sucursales por todos lados por lo cual era más que común que mi padre viaje y todos esperaban que yo estudie administración de empresas para continuar con el legado familiar y hacerme cargo de la empresa y formar la familia perfecta como la que habían formado mis padres.
Mi nombre es Sofía, pero nadie mi dice así excepto mi abuela, todos me conocen como sofí, era todo lo que unos padres y la sociedad consideraban una chica modelo, inteligente, tranquila, generosa, participaba en todas las obras benéficas, era querida por todos los habitantes del pueblo, prefería una noche de libros y películas que salir de fiesta, no consumía ni alcohol ni ningún tipo de estupefacientes como lo solía hacer la mayoría de adolescentes en este pueblo. Tenía un novio desde que tenía uso de razón, ante todos éramos la pareja perfecta, Tomas era mi vecino y además el hijo de uno de los jueces más prestigioso del país y dueño de un estudio que tenia los casos mas importantes, pero como todos los miembros de Clayton era muy fiel a sus raíces y jamás abandonaría su pueblo. Tomas era una de las grande promesas, iba a estudiar abogacía en la universidad de la ciudad para seguir con la tradición familiar y hacerse cargo de el estudio de su padres.
Mis padres amaban a Tomas, el era perfecto como decían ellos, rubio, alto . ojos azules, carismático, inteligente, siempre bien arreglado con sus pantalones en tonos sobrios, sus camisas haciendo juego, su perfume, el jamás estaba sin estar arreglado, siempre fue un chico diez, en el colegio todas solían morir por él, era bueno en los deportes. El sabía lo que era, lo que generaba y lo usaba a su favor. Egocéntrico por naturaleza igual que su padre, a pesar de todo eso Tomas tenia buen corazón, era bueno y de vez en cuando un poco cariñoso, desde chico estuvimos destinados a estar juntos, nos criamos jugando en la rotonda. siempre estuvo en mi vida y cuando crecimos nos pusimos de novios- Yo moría por el, lo admiraba, lo quería y estaba tan orgullosa de que el sea mi novio, lo presumía ante todos, como quien presume un trofeo. no teníamos muchos momentos de romanticismo, ni muchas cosas en común.
Tomas no era lo que se puede considerar un tipo romántico o cariñoso, todo se basaba en aparecías y en ser práctico, el me quería a su forma pero me quería y yo lo sabía, pero a veces imaginaba que sería tener uno de esos romances como los que leía en mis libros, esos romances en los que el corazón te late a mil por hora cuando esa persona se acerca, que se te ponga la piel de gallina, sonrojarte por algún comentario, que la otra persona te genere sensaciones impensadas. quizá solo eran libros como solía decírmelo Tomas, que la vida real no era así, pero yo soñaba con un amor de ese tipo , sentir hasta que te duela, tener ganas de ver a alguien a toda hora y que te provoque muchas sensaciones ¿pero por que esperar algo así? si mi vida ya era perfecta según los demás.
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Aprendiendo a sentir
RomanceSoy Sofi y vivía en la calma,mi vida estaba completamente organizada, cada casillero de mi vida estaba lleno con las personas que creía que debía estar...pero un día llego y cambio todo, hizo que nada tuviera sentido, ya nadie encajaba en su casil...