I'm a mess

305 19 3
                                    

 Dos años atrás.

–¡TE HE DICHO COMO UN MILLON DE VECES QUE NO TE QUIERO CERCA DE ANDREW MASSAGER!

–Edward, sólo es mi amigo… –La tomé su brazo izquierdo, ella hizo un gesto de dolor, pero para ser sincero en este momento la rabia cegaba mis ojos.– ¡Suéltame! ¡Me estas lastimando!

–¿SABES? ¡YA REALMENTE ME INTERESA UN COMINO LO QUE HAGAS CON ESE IMBÉCIL!

–¡Sólo me invitó a comprar unas cosas! ¡¿Por qué tienes que hacer tanto drama?! –Ahora ella se estaba alterando también.– ¡¿Crees que yo no sé qué te acuestas con otras mujeres a mis espaldas?!

–¿TE GUSTA? ¿QUIERES ESTAR CON EL EN LUGAR DE ESTAR CONMIGO? ¡BUENO YA, ERES LIBRE PARA QUE VAYAS Y SEAS FELIZ CON EL! –Mis palabras salían de mis labios sin pensar, pero no me arrepentía.

–Ed claro que no, yo…

–Yo creo que lo mejor es que esto se acabe, que terminemos.  –Dije “calmado”. Ella se limitó a negar con su cabeza. Yo me di la vuelta y tomé mis cosas del sillón, en el momento que iba a abrir la puerta sentí su mano tomándome de la cintura. Voltee a verla y sus ojos estaban completamente llenos de lágrimas.

–Ed, por favor, deja de ser tan impulsivo y escucha…

–Adiós. –Di media vuelta y salí de ahí.

En este momento no había nada que escuchar, nada que hablar.

Presente.

–Otra. –Le exigí al camarero. Los recuerdos me atormentaban esa noche, las memorias de ese día divagaban por mi mente y por eso me encontraba en un bar, como siempre, creo que ya podría considerarlo mi segundo hogar. ¿Qué había pasado conmigo? Bueno, les contaré, en dos años habían cambiado muchas cosas, no volví a la universidad de música en la cual estaba, sino que congelé todo el semestre, de mi casa iba al bar, y del bar me retornaba a casa con una o dos mujeres, ya ni siquiera tenía sentido común, lo único que había hecho con mi vida en este tiempo era arruinarla. Ella se había ido, no había vuelto, como yo imaginé que lo haría, no había llamado, no se había reportado, lo último que escuché sobre Olivia Cooper era que salía con otro tipo, me daba asco y bronca pensar que ella se acostaba con alguien más que no fuera yo, ¿cómo es que la ausencia de una persona puede cambiar tanto tu animo? Realmente no sabía la respuesta... pero la necesitaba. Luego de unos cinco minutos el alto camarero puso un grande y rebosante jarro de cerveza frente a mí, olvide mencionarles que me encontraba en "The Gio's Bar" el mejor de Londres, simplemente daban las mejores bebidas. Tomé mi jarro, la llevé a mis labios y el embriagante sabor a alcohol corrió por mi garganta, y la bola de pensamientos tomó mi cabeza de nuevo, “¿Dónde estará ella? Seguramente no se acuerda de mí, extraño tanto sus caricias, debe estar con cualquier imbécil.” Pensé, estaba completamente destrozado, sé que había sido por mi culpa, y lo lamentaba tanto, quería verla una vez más, escucharla diciendo mi nombre o abrazándome y diciéndome que todo estaría bien, pero se fue por mí culpa. Cuando habíamos tenido la pelea no nos llamamos y ella no me había escrito, lo cual era extraño ya que después de una pelea era ella la que siempre me escribía, un par de días después fui a su departamento pero no se encontraba nadie ahí, luego fui a casa de sus padres y estos me dijeron que ella se había ido a Bradford pero no sabían si volvería, me había dejado aquí sólo sin siquiera despedirse, todo esto me afectaba demasiado, yo mismo me había convertido en un completo desastre, por dentro y por fuera, “¡Soy un  imbécil! ¡Lo soy mierda, lo soy!” me decía seguidamente, mientras colocaba el jarro vacío frente a mí. Alrededor de unos diez minutos el bar estaba tan lleno que no entraba ni un alma más, iba a pedir otra cerveza cuando la vi, su piel blanca, cabello castaño y sus hermosos ojos grises, sabía que no era realmente mi Olivia, la había imaginado por tanto tiempo que ya sabía cuándo era una de esas malditas ilusiones, ella volteó y me miróy sentí algo raro, algo que tenía mucho tiempo sin sentir, esperanza. Y no fue hasta el momento en el que ella se acercó y me tomó la mano que supe que esa no era una de mis ilusiones, no era un espejismo, no era algo ficticio, ¡ERA ELLA! Mis labios no pronunciaban palabra alguna, estaba completamente perdido en ella.

I'm a mess (Concurso: Multiply Stories) GANADOR DEL PRIMER LUGARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora