Foresttown

Capítulo 1 | La Nota

Un gran grito se escucho en el depósito del Instituto. La policía no tardo en llegar para inspeccionar y encontrar una horrenda nota escrita con sangre junto a lo que parecía ser el cuerpo sin vida de una alumna, Ana, yo la conocía, me dio sentimiento el hecho de que ya no la volveríamos a ver, los policías me interrogaron, no les pude dar mucha información pues, tenía como un mes sin hablar con ella, toda la sección tuvo que ir a su funeral, yo igual aunque me negué bastante, jamás me ha gustado ver gente llorando y mucho menos ir a ver cómo tiran a alguien en un hueco de tres metros. Son muy extrañas las cosas que hacemos las personas.

Su ataúd estaba cerrado y tenía una foto de ella. Muchos de los rumores dicen que le cortaron cada miembro del cuerpo o qué la quemaron casi al punto de volverla ceniza.

_ Pss, hola, ¿Que piensas?- Dice mi amigo Antonio acercándose con Melanie. A Antonio lo conozco desde muy pequeño, aunque siempre ha sido más alto, yo sigo siendo el mayor,  su cabello es oscuro al igual que sus ojos, casi semejantes al carbón.

Casi todos están con ropa elegante.  Hombres con traje y corbata, mujeres falda larga y blusa de color negro, como forma de luto. Sigo pensando que es muy rara la interpretación que le damos a algo tan simple como un color.

_ No, en nada, solo me distrajé, y ustedes ¿cuando se van?_ Digo en respuesta a la pregunta de Antonio.

_ ¡Oye! ¿Y los modales? ¿Desde cuando alguien responde un saludo de esa forma? ._ Dice Melanie con algo de molestia, sé que no conmigo. Melanie la conozco desde hace más tiempo que a Antonio, su familia y la mía siempre a tenido una buena relación. Ella realmente es bajita de estatura, su cabello es castaño y sus ojos son de un color verde muy peculiar.

_ Primero, ¿te sientes bien Melanie? Segundo, no me quiero ir sólo a casa, así que me voy con ustedes y tercero, ya quiero irme.

_ No me pasa nada, ¿de acuerdo?_ La miro con los ojos entre cerrados. Ella suspira.- Bien, si me pasa algo, es qué... me siento culpable de la muerte de Ana, resulta que el día en el que ella murió, a la hora del almuerzo ella me pregunto si podía comer conmigo y yo le dije que se jodiera y una hora después la... encontraron... muerta._ Dijo Melanie en un susurro. No hay que ser un genio para saber que cargar con la culpa de una muerte es muy difícil.

_ ¿Porque hiciste algo cómo eso? ¿Eso no parece algo que tú harías?_ Dice Antonio en forma de regaño, pero con un leve tono de culpa en su voz.

_ Es que alguien me retó que a la siguiente persona que me hablará le dijera jodete, y ella me habló y sabes muy bien cómo soy con los retos, solo que no me paso por la cabeza en ningún momento que eso podía llegar a pasar._ Dijo Melanie refiriéndose al homicidio de Ana.

_ Eres mala Melanie, Ana era nuestra amiga como se te pudo ha...- Interrumpo a Antonio.

-No deberías estar regañadola, conociendote tu la debiste haberla retado.

_ Por supuesto que no, yo..._ Lo miro con mala cara.- Y no sé porqué te estoy respondiendo si tú tienes razón, oigan llevamos un buen rato aquí no sé ustedes pero yo me voy.

_ Vámonos, en verdad es tarde, de todas formas ninguno de los dos.- Los apunto._ Van a salvarse del castigo que voy a ponerles, solo tienen que esperar el momento justo._ Empiezo a caminar con la sobre idea de que ellos también lo hagan.

***

_ ¿Por que vinimos caminando si son treinta minutos de aquí hasta el pueblo?- Dice Melanie extremadamente cansada.

_ Tranquila, ya llevamos quince minutos._ dijo Antonio igual o peor de cansado, la diferencia es que tenía más ánimo que Melanie.