Recuerdas que te dije que ya no me importaba nada? Que hace mucho dejo de importarme lo que me pasaba, me cerré en no sentir nada, pensé que estaba evitando el dolor. Hasta que te conocí y sentí eso que tanto estaba evitando. Me importaste. Sentí algo, tú me hiciste sentir de nuevo.
Pero, sabes por qué me cerraba? Por qué era indiferente? Sabes?
Dejé de esperar cosas de las personas, sabía que en algún momento me fallarían, fue así que apagué mis sentimientos y solo me deje llevar por los momentos.
Al sentir algo, estaba en peligro. Ya no había vuelta atrás. Me rehusé a ver que en verdad algo en mi cambiaba. Tenía miedo.Cuando algo me lastima, yo me quiebro, lloro, me desarmo. No quería que eso pase de nuevo.
Pero ya era tarde, habías aparecido en mi camino.
Todo iba tan bien, hacía las cosas sin culpa, sin consciencia, sin sentimientos. Nadie podía lastimarme, había creado una capa que me protegía, me protegía de las personas, de ti.Estaría tan distraída que no me di cuenta, no me di cuenta que eras tú el que alteraría todo en mí.
Me moviste el piso por supuesto. Un terremoto más bien. Sacudiste sentimientos que estaban guardados, aquellos que al darte cuenta que los tenías muy dentro y te estaban lastimando.
¿Por qué tú? ¿Por qué yo?
Una casualidad tal vez, pero una casualidad llena de intención.