Mermaid

922 133 51
                                    




Enterró sus uñas en la tierra húmeda, gimiendo de dolor mientras respiraba con dificultad.

La época de migración siempre era una travesía demasiado peligrosa para todas las sirenas y tritones que se desplazaban por debajo del mar silenciosamente. Las aguas cálidas eran el objetivo, el único lugar en el que podrían estar tranquilos y suficientemente cómodos para cuidar de sus crías.

Las leyendas de los marineros contaban mucho sobre la mítica existencia de su especie... las sirenas que llevaban a la deriva los barcos, cantando y embrujando a las tripulaciones en el altamar que tenían la desdicha de encontrarlas. Aquellas historias no eran del todo una mentira. La soledad del océano las hacia desear cosas que jamás podrían conseguir de la manera convencional... entonces cantaban para ellos, confesándoles amor para que las acompañaran al fondo del inmenso mar, donde los peces de colores más curiosos nadaban con libertad y el peligro acechaba en la quietud de los arrecifes.

Aquella noche de tormenta, sin embargo... las cosas fueron un poco distintas.

Asomó sus ojos ambarinos por encima del agua, mirando a lo lejos la luna que estaba cubierta por una capa gris en el cielo, incluso las estrellas habían huido dejando el barco que se mecía violentamente en total soledad. Los humanos a bordo gritaban desesperados, izando las velas y remando contra la corriente que comenzaba a desviarlos de su ruta trazada en el mapa.

Una ola se alzó sobre ellos y azotó contra la superficie. Muchos hombres cayeron al mar, donde la oscuridad los consumiría y morirían casi de inmediato. Los demás, estaban luchando por levantarse y correr a zonas seguras donde no pudiesen ser arrastrados por el impetuoso mar. Nadó más cerca, tocando la madera del barco con su mano y mirando hacia arriba donde un hombre semi-consciente le devolvió el gesto con preocupación.

- ¡Sirenas! – gritó con la fuerza que le quedaba, intentando alejarse de la barandilla de donde había quedado sujeto.

El mar gimió con fuerza y la criatura de ojos ambarinos supo que a todos ellos no les quedaría mucho tiempo en esa terrible tormenta.

No eran solo ellas las que tomaban las vidas de las tripulaciones... el mar era una entidad muy recelosa que no soportaba a los forasteros. Un lugar lleno de maravillosos y oscuros secretos que no debían ser desentreñados por ninguna otra especie que no perteneciera a su perfecta creación.

Listo para partir lejos de la tragedia, comenzó a sumergirse bajo el agua cuando algo filoso se enterró en la carne de su hombro, dejándolo sin aliento mientras se hundía en el agua, mirando los ojos del aterrado humano que sonreía con malicia. Sujetó el madero e intentó retirarlo, la sangre comenzaba a esparcirse por el agua y los tiburones pronto estarían cerca, listos para alimentarse.

Sus ojos desesperados miraron alrededor... justo antes de nadar rápidamente en sentido contrario del de su tribu.

Cuando su cuerpo comenzó a sentirse débil y sus ojos se cerraron, fueron las corrientes marinas las que guiaron su camino en total oscuridad.

Cuando sus ojos se abrieron nuevamente no sabía donde estaba, la lanza seguía enterrada en su hombro y su cola se había transformado en un par de largas y pálidas piernas, el sol estaba brillando en el cielo y su piel se sentía ardiendo ligeramente, desnuda bajo las copas de arboles grandes y frondosos.

Sus ojos se llenaron de lágrimas y enterró los dedos en la tierra, sollozando con fuerza mientras apenas podía escuchar los cantos de las aves que lo miraban con curiosidad.

No notó la mirada curiosa del alto hombre que se encontraba observándolo desde las sombras de los arbustos. 

🐠

Hola, solo vengo a dejar esto (prometo que dejaré de subir cosas, lo juro ToT comenzaré a terminar todo)

Espero que les guste, será un mini fic 🍑💓 así que no se lo pierdan.

En la historia se estará explicando unas cuantas cosas, así que seamos pacientes. 💁🎉

Acompañenme a este bello viaje.

Sayonara. 🎉

🐇

El único pez en mi estanque (YuDo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora