One Piece Week 2018

Segundo día

Declamier: Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Eiichirō Oda.

Pareja: Sanji Vinsmoke x Zoro Roronoa

Tema: Amor prohibido

Título: Entre el olvido y las estrellas del firmamento.

Si el mundo conociera mi penosa historia, un mar de lágrimas cubriría parte del lugar, sin embargo y aún después de todo lo sufrido, la esperanza me cubre como un manto de consuelo, sé que te preguntas ¿Qué pasó?, te lo contaré pero se discreto.

Siendo yo un joven de gran vocación por la cocina, escape de casa para volverme un maestro cocinero, un gran chef, el mundo fue difícil, tuve altas y bajas, y mientras estaba en bajas situaciones, me encontré a un joven con un extraño cabello color verde, su mirada chocó con la mía, y ambos supimos que estábamos enamorados, Zoro se llamaba, el igual sé había fugado de casa, con su sueño de ser un espadachín, recuerdo haberme reído de su sueño, pero él me miro furioso y silencie mi risa, y aunque ambos estábamos en bajas situaciones, supimos avanzar él trabajaba duro en el muelle, mientras yo preparaba comida para un posada, ganábamos poco dinero, pero nuestros esfuerzos eran enormes en ahorro, y con los sentimiento a flor de piel, él me confesó con sus mejillas sonrojadas que yo le gustaba, y yo reí avergonzado, pues él también me gustaba, y el tiempo nos hizo feliz, ambos nos mudamos a un cómodo pero pequeño departamento, aún seguíamos ahorrando para nuestros sueños, una noche habíamos peleado por una chica que me había ofrecido su número, yo la había rechazado como un caballero, pero la chica era muy atrevida y aun así insistió que la llamará, no accedí, pero Zoro había encontrado el número y con furia en sus ojos me reclamo, al cual yo respondí al ver mi confianza deshonrada, toda una semana duro la pelea, él llegaba tarde, y yo me preocupaba, una noche llegó con un golpe en la mejilla, yo lo mire y tire mi orgullo, lo agarré de la cara, él se negaba pero lo mire y me regreso la mirada, se veía pérdida, entonces lo abrace y le di un beso en la boca, nos entrados en una burbuja de reconciliación que llevó a nuestros cuerpos a la cama, dejándome ver por primera vez su cuerpo desnudo, sus mejillas sonrojadas me debilitaban, ame el momento que él se entregó a mí, una noche llena de pasión y amor reflejados en un simple acto, desde ahí nuestra relación se volvió más fuerte, y los años pasaron, ahora él era un entrenador y yo un gran chef del lugar, más sin embargo el destino tuvo la osadía de probar más nuestra relación, y más por la carta que llegó al departamento, escrito en japonés yo no lograba entender que era, hasta que sin razón alguna, Zoro se tensó, en ese momento sabía que algo pasaba, y entonces se volvió distante, un amigo mío hablaba japonés, me ayudó a leer la carta, el mensaje era claro, Zoro era hijo de un yakusa que lo obligaba a volver, ese día al regresar, descubrí a Zoro haciendo las maletas, preguntaba que pasaba pero él no me miraba y quiso salir, pero le impedía el paso, quiso golpearme pero agarré sus muñecas, lo lleve a la cama, ahí empezó a forcejear y le grite, le grite que ya sabía que era un yakusa, él se sorprendió, y bajo la mirada, yo lo abrace y le dije cuanto lo amaba, y que no me dejará, el me abrazó, me dio un beso en la boca y me sonrió.

-No te quiero dejar, pero si quiero que vivas, me tendré que ir- me dijo entre murmullos que escondían el sentimiento más cruel; la desolación, ambos los sabíamos, sin embargo yo negué con la cabeza, lo bese fuertemente agarrando su pecho desabrochando sus botones y besando su pecho, dejando marcas de propiedad, recuerdo murmurar cuanto lo amaba, y cuando lo deseaba, y lo mire

-Eres mío, sin ti me muero, y así que quédate- loe susurre, y él me miro, recuerdo que ese día hicimos el amor todo el día, cuando desperté estaba a mi lado, lo abrace y no lo deje ir, aun cuando nuestra vida corriera peligro, ambos saldríamos adelante.

Ahora escondidos en algún lugar del cual no diré su nombre, empezamos con nuestros sueños

Lamento la mala redacción y la mala ortografía,

Espero les haya gustado la historia

Nos vemos pronto