<< Z a p h i r >>

T W E L V E

Verlo así de alguna manera me rompía el corazón, no lo conocía del todo pero mi mente sentía una sincronización con la suya, Joseph parecía un roble pero por dentro estaba hecho de vidrio y ni precisamente vidrio templado, de uno que era frágil como si fuera una copa de cristal.

Eso me hace pensar que Joseph tenía sentimientos y también lloraba, también sentía dolor y jamás nos acostumbramos a sentirlo, por más fuertes que nos veamos frente a los espejos nunca podremos separarnos de esa sensación hiriente.

Y luego, luego estaba yo, que me había vuelto una piedra fría y de corazón cerrado, no quería abrirlo pues me habían dañado mucho y algunas veces esos recuerdos me aturdía fuertemente en la cabeza, pero también me dolía, también sentía, también gritaba ¡Aquí estoy!

-Joseph quiero suponer que yo te la recuerdo y lo que menos quiero es que tu la veas en mi- me senté a su lado y acaricie su cabello con delicadeza

-Asi es Zaphir me recuerdas a Nadia, pero yo no voy a permitir que mueras-

-Joseph apenas me conoces- solté un  largo suspiro

-Lo se Zaphir pero quiero conocerte más y salvarte, desde que te vi sentí una conexión que con nadie he sentido como si tus manos fueran hechas a mi medida-

Me había dado cuenta de que Joseph podría ser realmente cruel pero podía ser tan dulce como un tarro lleno de miel, y eso... Eso era magnífico, Joseph era magnífico y llevaba pocos días de conocerlo y mi cuerpo me pedía a gritos conocerlo más.

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Cuando temrino aquel encuentro un poco triste y un poco romántico, Joseph decidió que lo mejor sería dormir un buen rato, y así fue el estaba acostado en la cama a mi lado y su respiración  era tan pacífica al igual que su rostro, no podía dormir y solo me dedicaba a contar los lunares de su cara y de su pecho.

Me puse a pensar en qué tipo de preguntar le haría mañana para conocerlo más, estaba tan hundida en mis pensamientos que no note cuando el brazo de Joseph se colocó sobre mi abdomen el cual no es perfectamente plano, nunca fui muy amante del ejercicio pero se veía que Joseph si lo era. No traía la camisa puesta y se le veían unos abdominales marcados como si hubieran sido hechos a mano.

Joseph me jalo más hacia el envolviéndome en sus brazos los cuales eran muy grandes para mí cuerpo tan pequeño pero se sentían tan calientitos y seguros que me quedé dormida.

Desperté dandole la espalda a Joseph y su respiración me hacía cosquillas en la nuca pero era una sensación muy placentera, hasta que me di cuenta que una de sus grandes manos estaba encima de mi pecho izquierdo y era un poco incómodo así que opte por levantarme y cuando quise intentarlo Joseph me empujó a la cama de manera un poco brusca

-Zaphir vuelve a dormir son las jodidas ocho de la mañana así que duerme-

-No puedo dormir Joseph- y era la verdad ya no podía conciliar el sueño

-¿Que necesitas?, ¿Un beso?- sus preguntas me sorprendieron

-!No¡- de ninguna manera quería un beso de Joseph

-Yo se que te mueres por probar estos labios- y la verdad es que si moría por probarlos

-Joseph lo úni...-. Mis palabras fueron interrumpidos por unos labios carnosos y muy cómodos, el beso era lento y Joseph llevaba en control, su mano estaba en mi nuca dando unos masajes suaves y satisfactorios.

Ahora me había dado cuenta de que los besos de Joseph eran una de las cosas más deliciosas en el mundo y no es que jamás hubiera besado pero con el me explotaba ese hormigueo en el estomago que no sentía desde el jardín de niños cuando mi madre iba por mi, esa adrenalina combinada con felicidad,  con armonía y con un pequeño toque de amor.

Holaaaa!
Espero que les guste!
All the LOVE XX

-Brokenxhxz 💖👑