Murdoc: El hombre que desechó un mundo por cualquier cosa. (Parte única)

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¿Lo ven? 

Es él. Murdoc Niccals, y está encerrado como un cuervo en una jaula. El pobre cuervo carroñero que suele ser.

¿Y que es eso? Oh. ¿Acaso fue un sollozo? Murdoc está llorando, nadie lo cree, nadie lo ha visto hacer eso alguna otra vez. Él está solo en su celda, puede hacer lo que quiera a sus anchas. Puede incluso masturbarse y decir "2-D..., Stuart..." sin ningún pesar.  Hace todo menos escapar de forma ilegal. Ahora no tiene deseos de hacerlo, siente culpa, pero no por un crimen en específico. 

¿O haber roto el corazón de su amada ave azul se puede considerar uno? Al menos no tenía merecido salir por eso. Mucha gente había velado de alguna forma por él. Mucha gente alrededor del mundo había estado siguiendo la cadena para que fuese libre. Pero ahora su empeño por largarse de ese lugar putrefacto se había esfumado. Y esa simple razón era 2-D.

Había visto la entrevista en donde podía ver a su dulce cantante con una imagen diferente. Se veía incluso como alguien de su edad en vez de un pequeño niño con insomnio. Pero en ningún momento pareció mencionar el nombre "Murdoc".

¿A que va todo esto?

La última noche que estuvieron juntos, el viejo verde había terminado con lo poco que le quedaba antes de entrar a ese abismo. 

Recordaba de forma viva ese repulsivo comentario, aquél que emanó de sus labios quebrados, provocando un corazón dolorido de su amado.

--Entiende que hoy es la última vez... Debo aclarar que no debes extrañarme...-- Murdoc ajustaba su jean apretado con el cinturón de cuero, se sentía tan importante como la reina de Inglaterra, pero la verdad es que no era así.

--Jamás dije eso... Iré a visitarte.-- Stuart le dio un beso, Murdoc le dio una bofetada.

--¡Nada de eso! ¿Que pensarían los bastardos del juicio? ¿Y si termino encerrado? No es que fuera un maldito puto, no como tú.-- Se colocó una camiseta de tirantes gris, de una repisa tomó una botella de licor barato.

2-D le lanzó una mirada que Murdoc jamás había conocido, una repleta de dolor, desprecio y engaño. Por primera vez el pobre bastardo de piel verde se sintió intimidado ante el pobre debil de cabello azul, no se guardó nada, Stu se puso de pie mientras tomaba su ropa del suelo, antes de salir de la habitación del hotel de mala muerte que era un recinto de su encuentro, le lanzó un puñetazo duro, que desorientó por mucho tiempo al viejo de cabellera negra.

No supo nada de Pot entonces.

Solo sentía como la culpa se dejaba caer en su cabeza. Oía el zumbido de un golpe seco en su pómulo. Gemidos de su ave azul aquí y allá, dolor, sollozos, culpa, culpa...

Alzó la cabeza, miró aquella lúgubre silueta delgada enfrente suyo. Un espíritu roto por su egocentrismo. Su precioso 2-D. Envuelto en llamas azules, sin reacciones por parte de ambos.

--Lo lamento...-- El ex-bajista se puso de pie, la sombra se mantuvo inerte.-- Por amor a todos los infiernos... te pido un jodido perdón.--

Trató de tocarlo, sus manos temblorosas lo atravesaron, él estaba en un ardiente fuego verde, que carcomía su piel con lentitud. 

--¡Perdóname! ¡Un hijo de perra... Es lo que soy...!-- Cayó de rodillas, con visiones de Stuart siendo tomado por aquel sujeto conspirador.

Ace disfrutaba de lo que no era suyo, más rencor, por que 2-D jamás negó algo contrario que amar exclusivamente a Murdoc. 

Pero nadie lo culpaba, nadie culpada a 2-D por revolcarse en la verga de otro. Realmente el responsable de todo era el satanista. Nunca sabía tener algo en serio y siempre lo arruinaba.

Atenerse a las consecuencias, Murdoc, eso es lo que debes hacer.

Mirar desde lejos como alguien atesora a ese precioso hombre que tanto te amó, más que a su vida. Mirar como el fuego se apaga ante tus ojos, esa llama que los mantenía unidos.

Todo por el insignificante estatus que tanto querías poseer y resguardar.

¿Que más quisieras que recuperarlo? ¿Salir de allí? Lo tuviste en tus garras y lo dejaste caer, fue tu culpa.

Ahora deja de insistir y permite que la llama se extinga por que ahora no hay más que hacer. Solo esperar y soportar un dolor ardiente, cobarde.

Murdoc, eres un cobarde.

¿Seguro que quieres salir de allí? 






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;) gracias por leer :3

Wildfire [2Doc] -OneShot-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora