30.- Peleas y acercamientos

48 2 6
                                    

Narra Franky :

Caminaba por los pasillos en busca de mi mejor amigo, donde demonios se había metido hace tan sólo un minuto estaba conmigo celebrando nuestra victoria y ahora parecía que la mismísima tierra se lo había tragado, llegue a los jardines traseros de los dormitorios donde encontré algo muy inusual

—¿Qué haces aquí? —pregunte extrañado —no deberías estar celebrando

—Puedo preguntar lo mismo —exclamo sonriendo dulcemente —una de las estrellas del equipo debería de celebrar

Sonreí era cierto una de las estrellas del equipo debería celebrar sin embargo me había olvidado por completo de eso

—Estaba buscando a Edward —dije sonriendo —no lo has visto o si

—No —exclamó tiernamente —creí que estaría contigo

—Estaba conmigo pero desapareció —dije sonriendo arrogantemente —te preguntare de nuevo ¿que haces aquí?

—Necesitaba aire —suspiro pesadamente —hay un idiota que no acepta un no por respuesta

Sentí como mis puños se apretaron y empecé a sacudir mi cabello frenéticamente

—¿Y quien es el idiota? —pregunte sonriendo forzadamente

—No recuerdo su nombre —me miró —te sientes bien

—Perfectamente —dije sonriendo falsamente —porque preguntas

—Es que cuando sacudes tu cabello es porque estas enojado, nervioso o preocupado —dijo tímidamente

—Cierto —respire profundo —pero no te preocupes estoy bien —la mire —puedo sentarme

—Claro —me senté a su lado —sabes me encanta el jardín

—De verdad —pregunto incrédula —jamas te imaginé como un persona que disfrutará de la naturaleza

—Mi papa siempre nos llevaba al parque cuando éramos pequeños y recuerda nuestros cumpleaños en el bosque —suspire pesadamente, si bien habíamos decidido que este año si lo celebrariamos aún estaba en mi memoria ese último cumpleaños que habíamos celebrado

—Cierto eran geniales —me miró —oye no —tocó mi hombro —no te pongas triste —dijo tiernamente —ya se —se levanto —vamos levántate —hizo esfuerzos para levantarme hasta que cedí y me levante

—Bien ahora que haremos —y sin previo aviso empezó a hacerme cosquillas —oye no —ahora yo empecé a hacerle cosquillas

Reíamos tanto que nos tropezamos y rodamos por el pasto hasta quedar uno frente al otro, nos miramos incómodos pude ver su cabello rubio con mechas rosas, sentía su respiración me acerqué a ella y la bese, esta vez fuimos más allá de un simple toque y había sido fantástico

Narra Valentina :

Los jardines no hay un mejor lugar para tomar aire principalmente cuando tu mejor amiga había desaparecido, atrás de la cafetería había uno muy bonito así que decidí sentarme ahí cuando descubrí que alguien estaba ahí

—Qué sorpresa encontrarte aquí —dijo sarcasticamente

—Digo lo mismo —afirme sonriendo

—A veces vengo aquí a pensar —dijo sonriendo traviesamente —me trae recuerdos, a ti ¿no? —asentí —bueno y tu porque tan solita

—Quería un poco de aire —me senté a su lado —por cierto felicidades por haber ganado

—Gracias significa mucho viniendo de ti —dijo arrogantemente, lo cual me hizo enrojecer —sabes no entiendo como es que no tienes a miles detrás de ti si eres preciosa —tomó mi mano —yo en su lugar aprovecharía cualquier oportunidad a tu lado

Corazones rebeldes (Editando) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora