La última oportunidad

Cumpleañero

Narra Dorian

---Viejo cuéntame ¿Qué haremos en este día tan especial?

No le presté atención a lo que Andres me decía.

---¿Haremos?

Me carcajee.

---¿Planeaste hacer algo sin mi?

Dejé de reír y miré con seriedad a mi amigo.

---No he pensado hacer nada aún.

Volví la vista hacía mi ordenador.

---¿¡Que!? ¡Es tu cumpleaños Dorian! No es como que fuera cualquier día.

Debía revisar varios informes pendientes muy importantes.

---Sino tienes nada más relevante que decirme puedes retirarte, más tarde te llamo para coordinar una reunión o algo ¿Vale?

Andrés me miró no muy convencido pero de un momento al otro una sonrisa estúpida se dibujó en su rostro.

---Oh no, no, ni se te ocurra hacer eso ¿Quieres que Sofía me mate?

Cada año el contrataba a una bailarina exótica, la cuál siempre llegaba a mi casa para hacer lo que mejor sabía.

---Si que si...

Yo generalmente siempre hacía que aquellas mujeres se marcharán, de hecho, solía pagarles para que le dijeran a mi amigo que habían cumplido con éxito su trabajo, sólo en un par de ocasiones accedí a aceptar su descarado regalo.

---Es enserio Andrés, realmente te agradezco el detalle pero no gracias.

Lo vi rodar los ojos.

---Como quieras...

Sonreí esperando confiadamente que el no hiciera nada.

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Mis colaboradores habían organizado una reunión por mi cumpleaños, la tarde pasé junto con ellos.

Ahora me dirigía al departamento de Sofía, estaba ansioso por verla, ya la extrañaba.

Narra Samantha

Contaba los minutos para que llegará y apenas sonó el timbre supe que se trataba de el.

Abrí la puerta y enseguida sentí su mirada recorriendo todo mi cuerpo, yo sólo llevaba puesto una camisa que me llegaba a la altura de los muslos.

---¿Dorian?

Me miró con curiosidad y confusión.

---¿Quién eres tú?

Cuestionó desde la puerta.

En ese momento me di cuenta de que, no importaba cuantas veces nos encontráramos, el nunca iba a recordarme.

---Pasa por favor, soy Samantha la nueva niñera de Naomi.

Lo seguí luego de que el ingresará.

Sonreí coqueta cuando me miró fijamente.

---Gracias ¿Está Sofía?

Mi sonrisa se esfumó.

---Ella no se encuentra pero me pidió que te avisará que no demoraria en llegar y que la esperaras aquí.

Aquello era mentira, sólo lo había dicho para retenerlo más tiempo conmigo.

---¿Dónde está Naomi?

Se sentó en uno de los muebles del living.

---Esta en su habitación, se quedó dormida.

Tomé asiento frente a el y me crucé de piernas.