Through the night [knj•pjm]

Through the night

[Esta noche, enviaré el resplandor de una luciérnaga a algún lugar cerca de tu ventana]

Una noche más de insomnio para Jimin. Para él era normal, estaba acostumbrado; desde hace un año nada es igual, no duerme como antes.
Ha intentado de todo, desde jarabes, pastillas, hasta algún té relajante. Nada funciona.
Le sigue doliendo el hecho de que Namjoon no esté; justo hoy se cumple un año desde su partida.

[En mi diario está todo lo que quiero decir y no puedo mostrártelo]

Jimin le ha escrito cartas, todas en un cuaderno que lleva con él a todos lados. En estas cartas le expresa todo lo que siente, cómo se siente, qué hace a diario y de esta manera, le dice cuanto lo ama.
Jimin quisiera correr a donde su amado está para besarlo, rodearlo con sus brazos, acostarse cobijados con una gran manta viendo películas como hasta hace un año, cuando todo era hermoso y perfecto.

[Recuerdo nuestro primer beso]

Pero nada es igual. La ausencia duele, lastima, quema cada fibra de su ser.
Quisiera verlo, sólo una vez más para decirle lo mucho que lo ama, que a pesar de todo, sigue siendo el amor de su vida, que lo extraña cada día más, que con el paso del tiempo la herida sangra y se hace cada vez más profunda.

[Y siempre te extraño, te extraño]

Finalmente, Jimin decide levantarse de la cama que compartía con su pareja, dar vueltas no sirve de nada.
Se sienta en el sillón que queda frente a una gran ventana en donde se puede ver la ciudad entera. Ese era el lugar favorito de ambos.
Ahí se sentaban a platicar sobre sus sueños, metas, ilusiones, anhelos, tristezas, problemas. Todo.
Entre ellos no existían secretos, hablaban todo. O eso era lo que Jimin creía.
-Nam, ¿por qué jamás lo dijiste?- Jimin sabe que le está hablando a la nada, pero espera que esa voz que tanto amaba y extraña, sea quien le responda.
Silencio. Es todo lo que recibe.
Se recuesta en el sillón y las lágrimas salen sin siquiera pedir permiso.
Abraza su cuerpo e intenta dejar salir todo el dolor que siente.
No sabe cuánto tiempo ha pasado llorando, pero el tiempo le parece infinito, interminable.
Voltea a la derecha y ahí está, una foto de Namjoon. La abraza con fuerza, toda la que sus brazos le permiten.

[Siento que desaparecerás en un lugar lejano]

-No debías ocultarlo, no debías sufrir solo-
A su mente llega aquel doloroso recuerdo de un Namjoon en el suelo e inconsciente. Aquel maldito día en el que su amado le fue arrebatado.

[Haberte conocido fue una bendición]

Los médicos le dijeron que ya no había nada más que hacer, había fallecido.
Fue la peor noticia que jamás le habían dado. En ese mismo instante se destrozó, su mundo entero se derrumbó.
Todo había sido perfecto ese día, le había pedido matrimonio después de siete años de una bella relación, pero en aquel momento ya nada importaba, ya nada tenía sentido.

[Aquí en mi corazón está todo lo que quiero decir, no puedo demostrarlo]

Jimin ya no quería recordar porque sólo se lastimaba, pero era imposible.
Porque su amor por Namjoon era inmenso.
Aunque no estuviera a su lado, siempre lo amaría y jamás amaría a otra persona con tal intensidad.

[Si estuviéramos juntos, qué bueno sería]

Está cansado de estar triste, está cansado de llorar, cansado de vivir.
Decide levantarse del sillón e ir a la calle.
Ahí aún se encuentran personas, parejas. Jimin sólo les desea felicidad plena, aquella que le fue arrebatada junto con su eterno amor.
El recuerdo de la persona que más amó en el mundo llega a su mente, piensa en él hasta en el último momento.
Cruza calles sin preocuparse, total, ya nada tiene sentido.
La foto de Namjoon, es lo único que le acompaña.
-Quiero amarte siempre-
Es lo último que dice, es su último pensamiento.
Entonces se deja llevar, deja de escuchar, y también deja de sentir.
Después de eso, todo es oscuridad.
Hasta que al fin ve una luz, y sabe que no puede ser nadie más que él.

[Pero quiero decir que te amo]