spoiled ❀ jackbeom

seis

Jinyoung y Jaebeom estaban fuera de casa, habían salido para distraerse pues estaban llegando al final de sus días libres, pronto deberían preparar su álbum para el siguiente comeback.

Fueron a una librería a conseguir cada uno un libro nuevo y luego caminaron un rato hasta que encontraron una cafetería y ahí entraron y pidieron sus respectivas bebidas. Se sentaron junto a la ventana y observaron a la gente pasar. La estabilidad, lo tranquilo y seguro era algo que ambos disfrutaban.

—Desearía que fuera así todos los días —dijo Jinyoung.

—Lo sé, es tan tranquilo. Imagina que fuera así de pacífico en casa.

Jinyoung rió: —Incluso si fuera así en casa no creo que nos encontraríamos felices ¿sabes?

—Entiendo lo que dices pero yo difiero —bromeó Beom.

—¿Vas a decirme que no extrañarías a esos ruidosos infantiles?

—Claro que lo haría —aceptó mientras tomaba un sorbo de café.

—En especial el ruido de cierto chino —Jinyoung decidió molestarlo.

—Yah, ¿qué hay sobre Jackson? El comentario del otro día fue también muy extraño.

—¿El del supermercado?

—Sí, ese.

—Solo decía la verdad. Jackson quiere llamar tu atención, y a ti te gusta.

—Yah, a mí no me gusta él —Jinyoung sonrió.

—Me refería a que te gusta que él busque tu atención pero gracias por echarte de cabeza.

—Jinyoung, yo...

—Jaebeom, está bien, nos conocemos hace años. Ahora, termina tu café y vamonos a casa.

Jaebeom lo miró con algo de recelo pero finalmente hizo caso y se apresuró a terminar su café. Luego regresaron al departamento y al entrar lo primero que encontraron fue a Jackson viendo la televisión en la sala.

—Oh, hyung. Hola Jinyoung —los saludó. Jinyoung le dió un suave codazo a Jaebeom.

—Voy a mi habitación, los dejo solos —dijo Jinyoung y se retiró rápidamente evitando que Jaebeom lo detuviera.

Beom miró a Jackson y no supo que hacer.

—Hola, Jack.

—Hola hyung —le sonrió suavemente.

—Yo...

—¿Quiéres un yogurt? —dijo levantándose y dirigiéndose al refrigerador—, iba a tomar uno justo ahora.

—Eh, sí.

Jackson tomó uno para él y otro para Jaebeom y se sentó de regreso en la sala.

—Ven, come conmigo.

—Planeaba comerlo en mi cuarto...

—Hyung, por favor —le pidió y el mayor suspiró.

—Bien.

Abrieron cada uno su yogurt y empezaron a comerlo, estaba realmente delicioso tanto que Jackson no pudo soltar un pequeño sonido de gusto. Se sonrojó apenado y Beom pensó que estaba realmente tierno así.

—Tranquilo, no ha pasado nada —sus ojos se hicieron incluso más pequeños al sonreír.

—Que pena, siempre me pasan esas cosas.

—Yah, te he dicho que no pasó nada —le dijo amable.

—Bien, no pasó nada —repitió Sseun con una pequeña sonrisa. Jaebeom miró su sonrisa y comió un poco más de su yogurt, tal vez comprar esos yogurts podían hacerse una costumbre. Y tal vez, comerlos juntos podría ser otra costumbre.