prólogo

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14 años atrás.

Fue una noche lluviosa y fría, mi madre, mi padre y yo estábamos en el auto después de haber estado en una reunión social. mi madre estaba sentada en la parte de atrás vigilandome ya que tenía 3 años.

Luego, todo pasa muy rápido, la imágenes en mi mente se presentaban una a la vez, mi padre intentado girar el volante, mi madre abrazándome para protegerme y yo llorando. la siguiente escena es la de un auto volcado, personas alrededor y mucha, mucha sangre.

Después del accidente mi tía materna Samira tomó mi custodia, ella es la hermana mayor de mi mamá y una mujer muy cerrada. Y así pasaron los años y mi infancia no llego ya que mi tía me mantenía dentro de casa siempre, al cumplir los 5 años ya sabia leer y escribir correctamente. Los días eran monótono, las mañanas limpiaba, por la tarde me las pasaba leyendo libros de texto, matemáticas, sociales, naturales, física, ect ya que tomaba clases en casa. Esa fue mi rutina hasta los 14.

Por primera vez hiba a asistir a una escuela y estaba feliz, obviamente no hiba a ser la primera vez que salía de casa ya que mi tia me llevaba al supermercado y la farmacia para que supiera que que comprar si necesitaba algo y como llegar ahí.

Llegó el día de ir a la escuela y yo sinceramente me sentía nerviosa, pero la verdad no fue nada del otro mundo, algunas personas se acercaron a mi pero yo los rechazé ya que mi tía Samira me había dicho que no hablara con extraños y como muy pocas veces salía todos eran extraños.

Después de la escuela me dirigí hacia mi casa pero al llegar al marco de la puerta sentí un aura extraña que hizo que mi espalda sintiera un escalofrío, al entrar pase por toda la casa y no había ni un alma hasta que llegue a mi cuarto y Vi una nota sobre mi escritorio así que empeze a leerla.

Cora me he ido de viaje por un asunto de negocios, no te tienes que preocuparte ya que volveré.
Seguiré depositando dinero en una cuenta bancaria que está a tu nombre, solo tienes que ir al banco que te lleve la vez pasada. Ya que te he visto crecer sé que usarás ese dinero responsablemente la tarjeta de crédito está bajo tu almohada. No regresaré pronto así que por ahora dependerás de ti misma.

Tía Samira"

Desde ese día vivo sola jamás falte a la escuela y tampoco hize amigos ya que recordaba el mandato de mi tía.

Actualmente tengo 17 años pero gracias a que fui muy “aplicada" iré a la universidad temprano, en tres dias será viajaré a la isla de Prada ¿Quieres acompañarme?

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