El despertador había sonado ya era hora de alistarme para mi primer día en la universidad, me cepillo los dientes, me baño, me visto y bajo de inmediato al comedor donde ya el desayuno está esperando por mí al igual que el chófer; me termino los deliciosos hot cakes con chocolate y me voy con el chófer en la limusina, quisiera irme aquí todos los días >>Pienso<< pero ya Iker dijo que solo sería hasta hoy por ser el primer día.
-Hemos llegado sir Nickolas-Dice el chófer.
-Llámeme Nickolas y gracias por traerme-le digo dedicándole una amplia sonrisa.
-Adiós, Nickolas no hay de que- Dice guiñándome un ojo a punto de irse.
Bueno ya llegué solo falta encontrar mi horario, caminaré por todo el campus a ver si veo un cartel o algo donde salgan los horarios.
Ya llevo dándole tres vueltas seguidas al lugar y nada, oh ahí viene una chica linda >>Pienso<< Y viene hacia mi este es mi día de suerte.
- ¡Hola! ¿Eres nuevo aquí?, pareces que estás un poco perdido, por cierto mi nombre es Sofía, pero me puedes llamar Sofi -Dice la chica con una amplia sonrisa hacia mí.
-Hola, preciosa sí, soy nuevo acá tanto en la universidad como en Londres, ¿Sabes dónde colocan los horarios?
- ¡Error!, primero no me digas preciosa no me gusta y segundo te enseñaré donde colocan los horarios, podré ser nueva acá pero mi padre trabaja aquí, así que lo conozco lo suficiente, ¡vayamos es por aquí! -dice señalando
-Excelente, vayamos.
Me guía hacia un edificio, entramos y vamos hacia una oficina que está repleta de alumnos y me señala una lista de nombres con los horarios a un lado.
- ¿Cuál eres tú? -Pregunta Sofi
-Nickolas, este es.
-Uh, genial tendremos las mismas clases, así no me sentiré sola ya que no conozco a nadie.
-Fantástico, y comenzamos mañana por la tarde, que tal si me acompañas a tomar fotos por la ciudad y así me enseñas tus lugares favoritos, y conozco un poco, ¿Qué te parece?
-Suena lindo, ¡vayamos! - ¿A dónde quieres ir?
-No sé dime tu, tu eres la que conoce.
-Bueno, primero iremos a la parada para agarrar bus, es mejor ver desde ahí y si te gusta un lugar solo dilo y nos bajaremos.
-Excelente, ¿hacia dónde es?
-Vente es por aquí-Dice agarrándome la mano mientras me guía.
>>Se siente tan bien tener nuestras mano entrelazadas es tan cálido y encajan tan bien como las piezas de un rompecabezas<<
Ya habíamos llegado a la parada cuando de inmediato ya se encontraba un bus, entramos y subimos a la parte de arriba me encantaba porque se podía ver todo, todo era tan diferente, tan elegante de un aire antiguo y de un frío temperamento.
- ¿Te gusta lo que ves? - Dice Sofía interrumpiéndome de mis pensamientos.
- ¿Bromeas? Me encanta, ¿pero sabes que me gusta más?
- ¿Qué?
-Verte a ti- Digo con media sonrisa.
>> Sofía logra un leve sonrojo lo que la hace ver aún más tierna<<
-Bueno, ¿Qué tal? ¿Te quieres bajar aquí? Hay un parque al frente, será divertido y podrás tomar fotos muy buenas-Dijo rápidamente muy nerviosa tratando de cambiar de tema.
-Está bien, bajemos -Digo con una risa entre dientes.
Ya estábamos dentro del parque era lindo se encontraba en muy buenas condiciones sin dudas era el mejor lugar para tomar buenas fotografías, estaba lleno de flores muy hermosas era el lugar indicado.
Pasó el transcurso del día tomé muchas fotos magníficas, me divertí mucho con Sofía no sé pero sentía que con ella podía confiar, muy pocas personas hacen ese efecto en mí, siento que si le contara un secreto hora mismo ella nunca se lo contaría a nadie pareciera que tuviera tiempo conociéndola y apenas la conocí esta mañana que loco ¿No? La verdad es que eso me gusta y mucho porque ya no podemos confiar en muchas personas porque siempre resultan siendo falsas pero con ella estoy seguro que no será lo mismo o eso espero realmente.
-Oye, que tal si nos vamos, ya se está haciendo tarde ¿no crees? -Dice Sofi.
-Sí, tienes razón, vayamonos.
Nos fuimos juntos a la parada del bus, inmediatamente llegó un bus y nos fuimos, nos despedimos ya que ella se bajaba unas paradas antes que yo, fue muy lindo ya que cada vez que la veo mucho tiempo, se sonroja me encanta cada vez que lo hace se ve tan linda, no sé qué habría sido de mi si no la hubiera conocido, hoy ha sido el mejor día desde que llegue acá, espero que el día de mañana sea igual o tal vez mejor, con ella no se sabe que podría pasar; me bajé en la parada que me correspondía al fin había llegado, justo cuando entré ya me estaban esperando mi madre e Iker en el comedor, tengo tanta hambre que me comería de todo, llego saludando a los dos.
- ¡Hola! Nickolas ¿Qué tal te fue hoy? Espero que muy bien-Dice Iker con entusiasmo.
-Excelente, aunque nos entregaron los horarios, mañana empezaremos como tal.
-Me alegra, Nickolas-dice Iker con una sonrisa-Me imagino que debes estar hambriento ¿O me equivoco?
-Pues sí señor, le mentiría si le dijera lo contrario y mentir no es lo mío-Digo entre risas.
-Carcajea- Bueno no te preocupes ya no tardan en traernos la comida.
-Y cuéntanos hijo, ¿hiciste nuevos amigos hoy? -Pregunta mi madre entusiasmada.
-Sí hice una amiga hoy, y bueno ya es cuestión de tiempo ver si hago más amigos, apenas hoy fue la entrega de horarios ya habrá tiempo para eso.
- ¿Amiga? ¿O algo más?
-Bueno por ahora solo amigos.
-Está bien, y ¿Cómo es hijo? ¿Es linda?
-Es muy linda, realmente hermosa, no había visto una chica igual antes, es linda, simpática, e inteligente ¿Qué más podría querer? Es única.
-Me alegro mucho por ti hijo, espero que muy pronto la traigas para conocerla.
-Gracias madre, pronto la traeré así sea como amigos, la traeré cuando menos te los esperes.
-Oye, no me tomes por sorpresa quiero darle toda mi atención ese día, estoy segura de que será una buena chica.
-Si mamá, lo es ya verás.
Ya había llegado la comida, creo que nunca me cansaré de los diversos tipos de comida que dan en la cena todo se ve tan delicioso, no aguanto más ya llegó la hora agarraré de todo un poco.
Harté todo lo que pude, siento que ya no puedo ni conmigo mismo, pero la verdad es que si pudiera seguir comiendo lo haría, solo me queda despedirme e irme a dormir.
-Bueno, mamá, Iker, que tengan buenas noches, los veré en la mañana-Me despido dándole un abrazo y un beso en la mejilla a mi madre.
-Chao hijo, que descanses nos vemos luego, no te duermas tan tarde.
-Sí mamá...-Digo alargando la última letra, alejándome para subir a mi habitación.
Al fin llegué a mi habitación, estoy demasiado cansado no aguanto ya quiero tirarme en la cama.
>> Ay, Sofía no sé qué hiciste en mí, pero no dejo de pensar en ti, ¿Qué estarás haciendo ahora mismo?<<.
