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Pov chanyeol

A mis 24 años de edad me han pasado cosas que la mayoría de la gente podría considerar como hechos tristes y deprimentes. El inicio de la grande lista de cosas deprimentes inicia a mis 7 años de edad.

Pertenezco a una de las familias más prestigiosas de toda Corea, y a mis 7 años gozaba de ciertos privilegios.

Todos quieren tener dinero, pero las personas que tienen dinero por lo general les falta AMOR, no siempre tuve falta de amor. Mi mama fue la persona más tierna y amorosa que a veces pensaba que no era real, y tenía razón, aquella persona que se encargaba de contarme un cuento por las noches y me miraba con una infaltable sonrisa en el rostro, no existía, era solo una fachada, una máscara para evitar que su querido hijo viera la realidad.

Mi madre se estaba muriendo, fue detectada con cáncer cuando tenía 5 años, claro que yo nunca me entere hasta que un dia mi padre con lágrimas en sus ojos me anuncio su muerte, por palabras de mi padre me entere que ella, no deseaba tener un tratamiento, simplemente no quería que la viera sufrir. Su último deseo fue pasar los años que le quedaban junto a su hijo, sin dolor, sin llanto, sin miedo. Mi madre me encerró en una burbuja alejándome del sufrimiento.

Mi padre con su muerte quedo devastado, a tal punto que aquellos cálidos ojos que me solían mirar, se convirtieron en miradas de resentimiento, me imagino que en su interior siempre me echó la culpa de la muerte de mama, quizás si ella no se hubiera preocupado por mi salud mental se habría sometido a un tratamiento y se hubiera curado. A mis 12 años se me presento a la que sería mi madrastra. Una mujer de aproximadamente 23 años con anchas caderas y un cuerpo de envidia logro seducir a mi padre.

La verdad es que no puedo hablar mal de ella, ya que fue como un fantasma en mi vida, podría contar con una sola mano las veces en las que mantuvimos una conversación lo suficientemente larga como para durar 5 minutos hablando. Mi vida iba bien, mi solitaria vida se basaba en mi habitación y colegio, no tenía amigos y tenía una familia ausente.

Un dia mi padre me sorprendió con la noticia que sería padre de nuevo, y por un momento pude ver como aquella mirada apagada en sus ojos se volvía a encender. Con el nacimiento de Jimin todo se volvió más cálido, no para mí, yo aún desayunaba, almorzaba y cenaba solo; nunca hubo unas felicitaciones por ser el mejor alumno todos los años, tampoco regalos por navidad, y por supuesto, no había nadie el dia de mi graduación. Jimin por otra parte era el centro de atención y amor, no lo culpaba, llegue amar a jimin, si me preguntaran quienes son las personas más importantes, Jimin estaría en el número uno.

El pequeño siempre quería jugar conmigo, no aceptaba un ''no'' por respuesta, siempre lo rechazaba, pero parecía no querer rendirse, termine cediendo ante él, y todas las tardes a escondidas de sus padres jugábamos, me contaba de su dia y yo del mío, a pesar de nuestra diferencia de edad sentía que era mi confidente.

Un dia jugábamos en el parque de nuestra casa y accidentalmente jimin se cayó de un árbol, sus gritos fueron tan fuertes que llamaron la atención de todos en la casa, como era la única persona allí inmediatamente me echaron la culpa. Ese dia fue la primera vez que mi padre se atrevió a ponerme la mano encima, y ese mismo dia decidí que sería mi último dia en esa casa.

Estuve sin hogar alrededor de dos días hasta que la familia de Kyungsoo me encontró durmiendo en un parque, su mama se apiado de mí, me ofreció un techo y comida; conseguí trabajo como mesero en un gran restaurante, ahí fue donde lo conocí. Un chico bajito y con ojos de cachorrito, era tan torpe y tierno, pero si él era torpe yo lo era mucho más. El chico me conto que acaba de cumplir los 18 años y que sus padres habían muerto, no me conto mucho sobre él, solo trabaje dos días más. Él me dijo unas palabras que me dieron fuerzas para dejarlo todo, me dijo '' sí, no eres bueno para mantener el equilibrio, quizás deberías conseguir un trabajo donde estés sentado o haz lo que te gusta'', con el dinero de mi último sueldo compre una computadora, cree un videojuego, pedí un préstamo y comencé a construir.

Después de 4 años soy dueño de una de las compañías de videojuegos más grande todo el mundo, y nuestra sucursal en Japón se encargaba de crear anime sobre nuestros videojuegos. La popularidad era increíble y el éxito lo que nunca me imaginé, pero seguía estando solo, ahora tenía amigos y una familia (la familia de kyungsoo) pero se siente frio, se siente vacío.

Hoy me desperté como todos los días, me encargue de crear una rutina, consistía prácticamente en dormir, trabajar, comer, y así donde vueltas dia tras dia. Sé que este dia será un poco largo dado que se entrevistara a mucha gente, quisiera dejar todo a manos de Minseok, pero siempre he sido de las personas que necesita conocer a la gente con la que trabaja, ya sea a los creadores como al personal de limpieza, no hay diferencia. Todos parecían normales hasta que apareció el. La persona que me hizo cambiar el rumbo de mi vida, allí entre tantos currículos se encontraba el, esto me da una razón más para conocer a los candidatos en persona.

Al dar mi presentación, no podía despegar mis ojos de él, seguía siendo lo más hermoso que mis ojos alguna vez hubieran visto, no sé si hice bien en contratarlo como mi asistente, no me creo capaz de estar concentrado en su presencia.

Tu no necesitas un asistente – dijo kyungsoo entrando a mi oficina sin tocar como siempre.

Puedo ver que has estado escuchando atrás de la puesta – rodé los ojos – a veces pienso que te gusto.

No es que me gustes idiota – suspiro y se sentó – solo que eres demasiado imbécil y siempre tengo que estar atrás tuyo para que, no cometas una estupidez.

Eres un dramático –solté una carcajada, a veces mi mejor amigo tiende a sobreactuar demasiado (se cree mi mama).

Me vas a decir ¿porque lo contrataste? – Pregunto entrecerrando los ojos - sé que es bonito, pero nunca eh visto que te dejes llevar por tus deseos carnales, ni siquiera estoy seguro si tienes deseos carnales.

Ok... punto número uno, yo si follo de vez en cuando – el me dedico una expresión de asco – punto número dos, le debo un favor.

Pues deberías ver como lo miras, parece que le quieres arrancar la ropa – volvió a hacer una cara de asco –

Quizás no estés tan equivocado – susurro bajito para que no me escuché.

Una Oportunidad, Una Deuda, Un Romance. [Chanbaek]♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora