Cap 3: Almuerzo y confesiones

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- Wow sarah, si que te inspiraste.

- jeje amiga, lo se- sonreí al escuchar eso.

Pasaron las horas, y el reloj marcó las 8 p.m

- Sarah, creo que es hora de irme, ya se ha hecho tarde.

- ohh esta bien nena, mañana nos vemos, cuidate.

- vale, besos.

*********

Ya eran las 7 am y ya estaba muy nerviosa, hoy era el gran dia, al fin le iba a decir todo a Jason , no sé como reaccionará, pero espero que de la mejor forma, ojalá, porque no lo quiero perder, ustedes saben, se tornaría incomoda nuestra relación de amigos.

Siento que me empujan, y odio que me empujen y de inmediato me volteo y pongo mirada lanza fuegos, es un chico de 11, lo conozco y él a mi.

- Lo siento Sarah.

- Tranquilo Mauro.

Me tranquilicé al saber que solo era Mauro, porque donde fuera otro, lo madreo.

Me dirigí a mi casillero, lo abrí y todas las cosas se me vinieron encima, siento una respiración en mi hombro y volteo.

- Jason ,¿que haces aqui? -lo mire confundida.

- Solo quería saludarte, ¿no puedo?- él se agacha y comienza a recoger mis libros.

- Si puedes, solo que es raro que estés a esta hora en mi casillero.

- Okey Sarah, tranquila, toma tus libros, nos vemos luego -me da un besito en la mejilla.

- Vale, nos vemos a la hora del almuerzo.

- okey, escucho a lo lejos.

Sonó el timbre y aún no llegaba Julie, ¿dónde se habrá metido? Cojo mis cosas y veo hacia el pasillo, era Julie corriendo como nunca lo había hecho, ya que a ella no le gusta llegar tarde a clase.

- Amiga, espérame.

- Bueno, pero saca el libro de química rápido.

No acabé de decirlo, cuando Julie ya tenía su libro fuera, corrimos como nunca y cuando llegamos, el profesor estaba en la puerta.

- Señoritas, ¿saben que hora es?- dijo seriamente.

- Si profe, lo sentimos- dijimos a unísono.

- Que no se repita por favor.

Nos sentamos al lado y nos empezamos a mandar papelitos.

- ¿Trajiste la carta? -Julie

- Claro! No se me olvidaría nunca - Sarah

- Y ...¿ya sabes que le vas a decir?

- La verdad... No, pero ya lo estoy pensando, le dije que nos vieramos a la hora del almuerzo.

- Bueno, ¿quieres que te acompañe?

- No tranquila, yo puedo sola.

- Okey

Me recosté en mi puesto y me puse a imaginar historias junto a Jason, a recordar momentos junto a él, pero se acabo mi fantasía cuando sonó el timbre.

Me levante y tambaleé un poco ya que estaba muy dormida, Julie me cogió del brazo y salimos rápido del salón ya que queríamos hablar un poco sobre todo lo que le iba a decir a mi traga.

- Nena, ¿estas preparada?

- Si, creo.

***********

Se llego la hora del almuerzo rápidamente y yo no encontraba que hacer, estaba muy nerviosa y con el corazón a mil, siento unas manos por mi cadera y una respiración en mi cuello.

- Hola hermosa

- Jason...

- ¿Lista? ¿Nos vamos?

- Si, ¿quieres almorzar?

- No y¿ tu?

- No,¿qué te parece si vamos al jardín que esta por las canchas de fútbol?

- Claro.

Ibamos caminando y hablando de muchas estupideces, yo solo podía pensar en como le iba a decir todo, cuando me di cuenta ya nos estábamos sentando en el pasto.

- Debo decirte algo

Yo solo podía mirar al suelo, no me sentía capaz de mirarlo a los ojos.

- ¿Qué cosa?

Tomó mi cara y la levantó, no podía creer la expresión que tenia, el nunca estaba preocupado pero hoy si.

- Está bien, te lo diré, pero prométeme que no te contactarás conmigo a menos que yo te lo pida en vacaciones, y que tampoco me digas nada sobre esto.

- Esta bien.

- Mira Jason, desde que te conocí, has sido una persona muy importante para mi, siempre me alegras cuando estoy mal, siempre me has gustado, pero este año ese sentimiento ha aumentado muchísimo, no se si haberte dicho esto fuera lo correcto, pero bueno, lee esta carta, ella detallara mejor todo lo que siento.

Él tomo la carta y la empezó a leer.

Yo le di un abrazo y lo deje solo,no quería saber como reaccionaría respecto a esto.

Se acabó el descanso y fui a mi clase de matemáticas, yo amaba esta clase,pero estaba muy triste como para ponerme a pensar en operaciones, así que me invente la tonta excusa de que tenia dolor de cabeza, me pase toda la clase de matemáticas en la enfermería durmiendo, cuando sonó el timbre brinqué y salí corriendo por mi maleta y mi amiga, no podía ver a Jason,porque no creo que yo fuera a tener una muy buena reacción al verlo.

El primer pasoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora