Caminos Diferentes [RiLen, KaiMiku]

Nuestras Historias

[esta es la parte de Rin y Len si no te gusta el MikuxKaito no leas más para abajo de la imagen ambas istorial son por separado].
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- ¿¡Por qué no aceptas Rin!?, ¿¡Es que acaso no soy lo suficientemente atlético para ti!?.

El chico sentia ofendido

- Lo siento, pero no estoy interesada --[ella] voltea, sigue con su camino, su rostro incómodo-- espero no pidas nada más que mi amistad.

Ella [Rin] siguiente con su caminar lento pero desidido hacia el instituto; solo había parado para rechazar otro pretendiente más, estaba aburrida de aquellas pérdidas de tiempo tan absurdas y estúpidas. Ella volvió a hacer su recurrente rutina otra vez, había vuelto hacia su estructurada rutina de monotonía de ir a él instituto mientras hacía parkour, saltando en los tejados, resibiendo el viento contra el rostro, dejando volar su corto cabello, desapareciendo miradas que le molestan y angustian, solo se detenía cuando era algo importante.

Por fin logro llegar a su destino, para ella es un lugar aburrido, no puede moverse solo estar sentada en su pupitre con su cabeza sostenida por sus brazos solo soñando con salir y hacer otras actividades; más no debería soñar mientras su profesor está ejerciendo su profesión.

- ¡Señorita Kagamine!, ¿¡Me está escuchando!? --[el] se [le] hacerca, su rostro furioso.

- ¿¡Qué!? --voltea todos la observan, su rostro nervioso-- ¡Lo siento Mucho señor Dell!, ¡No volverá a pasar! --[ella] baja la cabeza.

- eso espero o no tendré más opción que pedirle que se retire del salón --[el] se aleja.

Para ella lo más repulsivo de estar en esa "cárcel" es no poder moverse, no poder hacer actividad física, y si solo soñaba con hacerlo era regañada. Rin es atlética, una persona competitiva por naturaleza, ella se dedica a diversidad de deportes pero su talón de Aquiles es el estar quieta, no lo soporta, ella piensa en que puede estar realizando miles de otras actividades en este momento; pero en cambio debe estar sentada en esa silla de madera bajo las expectativas de sus profesores y miradas celosas de sus compañeros.

Ella continuo con su habitual mueca de sueño en su rostro, veía hacia el profesor sin notar que el [Len] la veía desde su asiento, el último en el salón. Las clases fueron algo más pesadas que la mayoría de los días; ella [Rin] estaba por estallar de felicidad con sólo oír sonar la campana para el almuerzo, el [Len] solo intentaba hacercarse un poco siquiera a la chica de cabellos dorados que abmiraba con gran devoción y ama con todo su corazón.

Una manada de feroces osos musculosos y sudorosos, que se notaba de lejos que eran todos rellenos de asteroides rodearon a la rubia, le impedían el pasó al pobre [Len] el chico tenía tan poca fuerza que no podía siquiera moverlos un poco, se rindió luego de que sus gafas callera al suelo y solo salió del salón decepcionado y avergonzado de el.

Ella [Rin] lo vio salir indignado, con enojo del salón, la preocupo mucho verlo en ese estado, Rin era una persona que podría preocuparse hasta de un pero de la calle; amable, bonita, sincera, alegre, deportista y lo más importante no tenía el cerebro hueco como el resto de mujeres de la generación, por ello todos la querian para sí mismos, pero la ven más como un objeto o premio al que poner en un estante que como una chica a la que amar y no lastimar.

- ¡Lo siento!, ¡debo irme! --[ella] se abre paso entre ellos-- ¡Espero me perdonen!.

Ella [Rin] corre hacia el [Len] quién no se ha percatado de que ella va hacia el, el solo camina con su cabeza hacia abajo; con su mente llena de pensamientos inútiles y necios haci también como tenebrosos, entrañables y aburridos, nada podría sacarlo de su oscuro charco deprimente.