Ni Contigo Ni Sin Ti

¡Game Over!

Al llegar a casa noté que Kathy estaba esperando por mi en mi habitación y al verla no pude contener mis lágrimas y empecé a llorar como una niña cuando sus papás no quieren comprarle su dulce favorito.

- ¿Qué te pasa Loly, por qué lloras?

- ¡El estúpido de Kem! - dije tratando de controlar mi llanto.

- ¿Kem? ¿Qué te hizo?

- Sólo quiere ilusionarme, jugar con mis sentimientos. El muy idiota me dijo que me ama y me besó.

- Pero eso está perfecto Loly, no entiendo porque lloras si eso era lo que anhelabas.

- Tu tampoco entiendes- dije en tono molesto- ¿es que Mary es invisible para ustedes? Kem tiene una relación con ella, ¿cómo es que me ama a mi? El sólo quiere tenernos a las dos comiendo de su mano y no le voy a dar el gusto, yo sufrí lo suficiente con Lewis como para querer experimentar lo mismo con alguien que ni siquiera mi novio es.

- Te entiendo, tienes razón. El es mi cuñado pero tu eres mi prima, eres mi hermana y no puedo permitir que te haga daño. Ven, recuestate aquí - Me dijo señalando sus piernas. Recosté mi cabeza y ella empezó a peinar mi cabello. Yo seguía llorando, no me salían las palabras y poco a poco me fui quedando dormida.

Pasaron los días y  ya no le escribía a Kem como antes, pero a pesar de eso, todas las mañanas encontraba ese mensaje de buenos días de su parte no importando que no le respondiera. Pasaron algunas reuniones y el no asistía, aunque no quisiera, él me hacía falta y ya me preocupaba saber la razón por la que no estaba asistiendo, que irónico.

Un dia en el cole...

- Hola Loly - Me saludó  Mary sentándose a mi lado al momento del almuerzo.

- Hola, ¿cómo estás?

- ¡Feliz como una lombriz!- dijo aplaudiendo como una foca lol.

No quería parecer antipática y tampoco es que me interese saber pero le pregunté la razón de su alegría. - ¿Ah si? ¿Y a que se debe eso?

Levantó su mano y empezó a acariciarce el cabello, a hablar moviendo la mano como si fuera oficial de tránsito dando señales de paso, fue como que quisiera que yo notara algo pero aún no tenía idea de qué era.

- ¿Qué te digo? Es que tengo un novio súper cool.

- Ah si, ya me habías dicho eso - dije tratando de cortar la conversación.

- Si, pensé que te darías cuenta.

- No te entiendo, dije algo confundida.

- Mi sorpresa tontita, gracias por ayudarlo a escoger mi pulsera, está hermosa, definitivamente quedé enamorada de ella y aún más de él.

En ese momento entendí todas las moricuetas que hacía, era  para que notará su regalo.

- De nada - dije llevándome la comida a la boda para no decir ni una palabra más. Peeo a diferencia de ella, no paraba de elogiar su pulsera y de decir que ama a su novio como el la ama a ella. Que tonta es. Me paré inmediatamente y empecé a caminar por todo el colegio con tal de distraerme y no pensar en Kem, Mary y su estúpida pulsera.

En una de nuestras reuniones llegó un chico nuevo, su nombre era Drake, muy simpático y de buen corazón, al menos eso reflejaba. Era constante, nunca se perdía una reunión y era uno de los más puntuales. Era de buen parecer y al igual parecía venir de una buena familia, y cuando digo buena es en todos los sentidos. Siempre daba aportes económicos para nuestros compartir y en ocasiones, el pagaba todo. Tenía un carro hermoso, su papá se lo regaló por obtener buenas calificaciones; yo siempre he llevado buenas calificaciones a casa y lo más valioso que me han regalado a sido una imitación de Patito Feo, no éxito nada costoso pero al menos buen gusto.