El Amor En Distinto Patron (Yoonmin, Namjin, HopeV)

17. Promesa de helado

Después de un buen fin de semana, bajo despreocupado las escaleras, su hermano estaba haciendo rápidamente la tarea, él camino directo a la cocina y se sirvió de su cereal favorito.

—Yug ¿Hiciste la tarea?

—Claro—mintió

—Más te vale

Sonrió, su hermano era muy atento, no mentía cuando dijo que lo había criado como a un hijo, a pesar de que sólo era un año mayor que él.

Ambos salieron de la casa, ya iban tarde por lo que procuraron apurarse. Se separaron al entrar no sin antes desearse suerte en el día. Entró a su salón de clases y se fue a sentar al lado de su querido carita de conejo, este hacía un puchero de lo más tierno

—Buenos días Kookie

El nombrado levantó la cara y le dedicó una media sonrisa

—Hola Yeom

—¿Qué ocurre?

Cerró los ojos y se recostó en la banca, soltó un gruñido molesto.

—El amor de mi vida se casará y no es conmigo

—oh ¿Hablas de la profesora de canto?

Lo miro asentir, ayer había faltado al taller de canto por pereza, eso significaba que su amigo llevaba triste desde ayer, acarició su cabello tratando de consolarlo.

—Nadie merece a una mujer como ella, diablos estoy muy molesto —bufó

—¿Quieres salir después de clases para que te distraigas?

Su amigo lo observó con ojitos iluminados demostrando agradecimiento.

—Si por favor, últimamente Jimin y Yoongi siempre están en la casa haciendo cosas pervertidas, créeme que escuchar a tu hermano decir "Oh si bebé brinca más" no es para nada bueno

Soltó una carcajada porque claro que conocía aquel sentimiento, Namjoon llevaba a chicas seguido a la casa en donde vivían anteriormente y los gritos eran muy fuertes.

—Bien, te llevaré al centro de videojuegos

Sus ojitos brillaron aún más, era tan lindo que fácilmente podría convencer a cualquiera de hacer lo que él deseará.

Al salir de clases Jungkook le aviso que iría con Yoongi por algo de dinero extra, decidió esperarlo en una de las bancas cercanas a la puerta, estaba mirando un pajarito brincar hasta que su teléfono vibró

—Hola—contestó

—Hijo, hola ¿Cómo está mi pequeño bebé?

La melodiosa voz de su madre retumbo en sus oídos

—Bien ma ¿Y ustedes?

—Algo ocupados pero bien, trate de llamar a Namjoon pero no contestó, tal vez podamos estar ahí en una semana ¿Algo que quieras de regalo?

—Sólo verlos, los extraño

—Nosotros también a ustedes, bueno me tengo que ir, ya les deposite más dinero los amo

—Adiós mamá

Suspiró con pesadez porque lamentablemente ya no creía en las promesas de sus padres. Sintió como alguien se sentaba a su lado, por un momento creyó que era Kookie pero se equivocó, nunca había sostenido una conversación con él, pero sabía que era una buena persona.