AMANDO A HARRY (LARRY STYLINSON FAN-FICTION)

CAPITULO 4

Hipnotizado, vio los dedos gráciles de Louis pasar a desabrochar y luego bajar su pantalón. Por su propia voluntad, las caderas de Harry se levantaron del sofá, lo que le permitió a Louis la libertad suficiente de tirar de los pantalones bajo sus caderas.

Harry gimió cuando el aire frio en su apartamento golpeo su eje.

—Y ahí está.

 —LOU....

—He soñado con esto, Hazz, pero tengo que decirte, — sacudió su cabeza, — que lo real es, por mucho, mejor que cualquier cosa que hubiera podido imaginar, y créeme cuando te digo que tengo una imaginación muy vívida. —Puso sus manos sobre las rodillas de Harry, suavemente separándolas un poco, y Harry se ahogó en un suspiro mientras Louis jugueteaba con sus dedos en el interior de sus muslos que casi temblaban.

Bastante seguro de que su corazón estaba decidido a latir de una manera que podría salir de su pecho, Harry sólo podía mirar, mientras Louis lo miraba con una sonrisa pecaminosa.

«Oh Dios.... »

Sin palabras, vio cómo Louis levantaba una mano, girándola levemente, para arrancar un trozo de hielo de un vaso que estaba apoyado en la mesa de café.

—Louis…que haces? — Pregunto Harry algo indeciso

— ¿Confías en mí?

—Por supuesto.

Eso le valió una verdadera sonrisa y Harry se dio cuenta del enorme peso que esas dos palabras llevaban, mientras Louis chupaba el pedazo de hielo en su boca. Harry miró a su boca, hacia esos labios delgados, sensuales, y murió un poco por dentro porque sabía que si ellos lo hicieran, si Lou lo chupaba, no habría vuelta atrás

Una vez que esta línea fuera cruzada, nunca sería capaz de recuperar su corazón.

«Idiota, ya has perdido tu corazón, ¿por qué detenerte ahora?

 Sabiendo que era una respuesta lógica a esa pregunta, pero incapaz de recordar lo que podría ser, Harry perdió toda línea de pensamiento cuando Louis sacó el hielo de su boca antes de inclinarse hacia abajo para presionar besos con la boca abierta por la parte interior del muslo de Harry.

Un grito ahogado se le escapó y se estremeció de pies a cabeza.

—Oh, Lou. —Dijo Harry, con una voz más ronca de lo normal

— ¿Qué, Hazz? ¿No te gusta de esta manera?

La respuesta, aunque Harry no estaba seguro de que habría sido capaz de ofrecer una coherente, murió en su garganta cuando Louis jugaba con el hielo en el lugar que había besado.

—Tu sabor es agradable. Mucho, demasiado bueno, Harry. Nunca he probado algo mejor.

Gimiendo, abrió los ojos a tiempo para ver a Louis acercarse más y lamer su eje desde la base hasta la punta. Harry se agarró con las manos a los almohadones del sofá lo mejor que pudo.

Su cabeza cayendo hacia atrás, sus ojos cerrados nuevamente, las sensaciones eran casi demasiadas. Hacía años que nadie lo había tocado así, años que no había conocido ningún toque distinto del de su propia mano. Esto, Louis tocándolo, era un sueño hecho realidad y Harry no quería que terminase, incluso si tuviera que lidiar con el corazón roto cuando todo estuviera dicho y hecho.