It's About You || Larry||

It's about us

Esta parte será narrada por ambos personajes.

Gracias por llegar hasta aquí! Gracias por quedarte.

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Algunos años más tarde ...

-Papi- una pequeña niña de cuatro años esta parada en la sala. Con su cabello castaño y unos ojos color verde. Trayendo con ella un sobre-, encontré esto entre mis juguetes y tiene tu nombre. Louis!

Sonrei ante la emoción de Mía. Agarré la carta y tenía mi nombre pero de remitente desconocido. Eso hizo que me interesará mucho más en leerla.

Lo hice la leí. Ahora solo quiero que Harry regresé, necesito verlo. Lo veo todos los días pero hoy la ansiedad de verlo era más.

Hace seis años atrás, cuando nos reencontramos, no dejamos que nada nos importara. Hablamos, nos pusimos al corriente de todo lo que hicimos el tiempo que nos separamos y en toda la conversación Harry jamás me dijo acerca de haber estado llorando todas las noches o de su intento de suicidio. Me siento culpable. Un año después nos comprometimos fue un día inolvidable. Pero lo supera el día de nuestra boda, ese día fue, es y será el mejor de todos. Dos años después la llegada de Mía, ese día casi me da un infarto. Y ahora con el pequeño Peter. Él tiene dos meses.

-¡Hola! ¡Ya llegué!-anuncio Harry mientras Mía corría hasta la puerta y se colgaba de su pierna, como cuando tenía dos años, algunas cosas nunca cambian. En brazos de Harry hay un pequeño envuelto en una mantita amarilla.

Esta escena es adorable así que me fue inevitable sacarles una fotografía, que mas tarde me encargaré de enmarcar. Sonreí mientras iba a su encuentro, besé la cabecita de Pet y un pequeño beso en los labios como bienvenida a mi Harry.

-Tienes hambre, corazón?-pregunte.

Una sonrisa burlona apareció, marcando sus hoyuelos.

-¿Aprendiste a cocinar en mi ausencia, amor?

Levanté una ceja mirándole despectivamente fingiendo molestia. Pero si me molesta!

-Exacto!

Causamos que Peter se despertará por nuestras risas. Pasamos así lo que restaba de día con muchas risas y carcajadas que parecían no tener fin. Y ese panorama es realmente encantador, además que, no espero que el hechizo se terminé pronto.

Me gustaría que todo se quede así, justo como está, perfecto.

¿Tenemos problemas?

Por supuesto que si, ¿quien no los tiene? Pero nada que una buena charla no arregle, hacemos frente a los problemas, juntos.

Era mi promesa el día de nuestra boda, lo cuidaria, amaría y respetaría siempre. Casi lloré cuando Harry lo hizo también.

Prometimos estar juntos por siempre; es mucho tiempo, lo sé, pero no estoy dispuesto a dejarlo solo. Ninguno de los dos esta dispuesto de hecho. Podría llamarse dependencia del otro, a mí me gusta decirle compromiso.

Somos felices, es lo importante.

Nuestros hijos son lo que más amo. Recordar como llegaron a cambiar mi mundo es gracioso porque no me lo esperaba.

"Ambos despertamos, pero yo me volví a dormir de todas formas es sábado y eso significa que no debo ir a trabajar, y ya no sentí a Harry a mi lado. Entonces baje hacia la cocina y lo encontré preparando el desayuno, mientras tarareaba una canción que sonaba en la radio.