No fue un simple accidente

Capítulo 4 Mi - Miradas y complicidad.

Caminaba silenciosamente por las frías calles hasta llegar a un pequeño complejo de departamentos, subió por las gastadas escaleras hasta llegar a un pasillo apenas alumbrado dónde se encontraba su piso, pudo observar la figura de una joven mujer de blanco uniforme, recostada por la baranda observando la pacifica ciudad sosteniendo una pequeña libreta entre sus finas manos y meciendo sus inusuales cabellos cortos de un color que recordaban a los cerezos en primavera de un extraño tono rosa.

-¿No deberías estar en la guardia nocturna del hospital?- Cuestiono con un frío susurro el azabache perturbando a la pelirrosa haciendo que esta dejase caer en descuido al suelo la libreta que estaba entre sus dedos.

-¡Ah! Sasuke, lo siento, no me había dado cuenta de tu presencia- Respondió con nerviosismo más con sus orbes color jade veía como él se acercaba y levantaba la libreta del suelo posando la oscuridad de su mirada en los símbolos gramáticos plasmados en tinta roja en el blanco papel.

"Es ampliamente aceptado que el término neurosis se aplica para intentar diagnosticar aquellas afecciones cuyos síntomas son la expresión simbólica de un conflicto psíquico".

-Sakura...- Sasuke suspiro con pesadez entregándole la libreta a su vecina y amiga –Mañana es 01 de Junio, oficialmente estarás estudiando en la mejor escuela de medicina de Tokio, deberías de estar pensado con que sorpresas se te aparecerá Naruto y no en este tipo de cosas.- Mencionó mientras daba una media vuelta y finalmente ingresaba a su solitario departamento serrando tras de si la puerta.

La joven aspirante a enfermera solo observo por donde se había marchado su amigo, sus finos labios rosados se curvaron en una sonrisa triste mas sus jades se posaron en la libreta, pasando un par de paginas y deteniéndose en dos notas escritas con su ligeramente descuidada caligrafía.

"Fetichismo es la devoción hacia los objetos que representan simbólicamente a un ser querido."

"La pérdida de un ser querido puede producir una sensación de incapacidad para cambiar las circunstancias de la vida y un sentimiento general de desesperanza ante cualquier cambio, lo que lleva a un callejón sin salida donde la muerte es la única solución – Depresión."

-Tienes razón Sasuke- Le respondió a la nada. –Mañana será un día para que la pasemos bien los tres.- Susurró cerrando la libreta.

Hinata reposaba sus manos sobre su regazo mientras su primo escuchaba atento a la historia contada por la joven desde su encuentro con Sai en el vagón del tren junto con las advertencias hasta su llegada al cementerio y su encuentro con el joven violinista, Neji oía seriamente la historia, una vez terminado el relato este llevó instintivamente una de sus manos hacia su mandíbula. Estaba tenso pero por otro lado se sintió aliviado al observar que su invitada se encontraba a salvo. El silencio se hizo presente en la habitación mientras los humeantes tazones de ramen se encontraban en la mesa.

-Así que ya conociste a Sasuke- Rompió el silencio el psicólogo mientras tomaba su respectivo tazón de ramen y comenzaba a comer mientras le restaba importancia no al hecho de que su prima se hubiera desmayado en el cementerio, si no al sujeto que le había causado tal conmosión.

-¿Sasuke?- Respondió con una pregunta la ojiblanca, de todos los nombres que se le pudieron pasar por la mente nunca pensó que aquél sujeto se llamaba Sasuke, ella en sus adentros se dijo a si misma "no es como que tenga cara de llamarse Sasuke" pero cuando intentó recordar su rostro solo se aparecia una cara borrosa como si se tratase de su propio reflejo en un espejo después de bañarse, la silueta estaba ahí pero no existía definición, no podía verlo, lentamente el rostro que aquél muchacho se fue desvaneciendo quedando solo en un vago recuerdo.