Miserable. (MyungYeol)

Negación ( chapter II).

Ahora me encanta su arrogancia.

No. La odio. Odio su estúpida arrogancia.

¡SungYeol, reacciona! No puedes dejarte ir por la calentura del momento.

Ni siquiera puedo disfrutar como se debe. Este lío mental me está volviendo loco ¿o son acaso los besos de MyungSoo sobre mi clavícula?

ㅡMe gusta tu lunar ㅡescucho.

"A mí también", quiero responder pero a cambio sólo me aferro más a su cuello mientras rodeo su cintura con ambas piernas.

¿Quieren saber cómo terminé así? Pues no, es demasiado vergonzoso para mí.

Por momentos pienso en MiJoo. Joder, tanto tiempo que me costó lograr una cita con ella. Y lo he echado a perder,pero por otra parte...

Maldita sea. La erección del chico se frota tan bien con la mía. ¿Esto me vuelve homosexual? No creo. Claro que no. Sólo me vuelve un ninfómano. Un ninfómano ebrio de 18 años que se emborrachó con un shot. Aún no puedo creerlo, pero entre más pasan los segundos, los minutos, parece que mi cuerpo va obedeciendo más a las caricias del pelinegro que mis propias órdenes. 

Mi lucidez va y viene como en un juego de atrapadas; sé que está mal pero justo cuando quiero bajarme del cuerpo adverso, mis músculos mandan la señal de que todo lo que estoy sintiendo es correcto; que se siente bien y quiero más. Y parece que MyungSoo capta el mensaje.

No sé cómo coño en un segundo logra dejarme 99% desnudo sin bajarme de su abdomen, y es que les explicaré un poco el panorama de la situación: un chico musculoso  (MyungSoo) parado frente a una asquerosa pared de callejón, cargando a un chico más delgado pero alto (o sea, yo), el cual no tiene playera, y sus prendas inferiores están por las rodillas, sin perder (claro), los calcetines y calzado. Así que sí, si mis padres o amigos vieran la posición tan homosexual y pasiva en la que estoy, seguro me darían por muerto.

¿¡Pero a quién carajos le importa eso!?

ㅡMyungSoo, o como sea que te llames, necesito de ti, ahora.

No puedo evitar gritar de placer y de miedo cuando siento algo frío entrar por mi recto. ¿Es un dedo? Lanzo una mirada intensa hacia el dueño de todas esas sensaciones y, al contrario de lo poco que conozco de él, me sorprende cuando éste me da un beso más calmo y suave; casi llegando a lo tierno si no fuera por su lengua que se enreda con la mía. Sin embargo, no puedo seguir con ese ósculo al sentir un segundo dígito en mi entrada. Esta vez aprieto mi mandíbula pero aún así se escucha un grito que rasguña mi garganta.

Que alguien me explique cómo terminé siendo el sumiso de un compañero de escuela. Con la conquista de Yein.

ㅡ¿Es la primera vez que te parten el culo?

ㅡ¿Tú qué crees, idiota? Agh ㅡentrecierro un ojo y muerdo el labio adverso al sentir cómo el gilipollas de MyungSoo mueve sus dedos dentro de mí. La verdad, qué horror. Por un momento me empiezo a sentir asqueado, como si la cruda moral empezara hacer efecto en mi juicio pero...

ㅡ¡Oh, dioses! ㅡjadeo al sentir que da con algo dentro de mí. Siento como la gloria y trato de mover mis caderas para que él dé nuevamente en ese lugar. Incluso siento algunos espasmos y por unos instantes mi rostro se transforma a uno de total placer.

Estúpido rostro arrogante frente a mí, hace que apriete mi mandíbula y gruña; él sabe lo que provoca en mí. Sabe que me tiene a su merced, pues su mirada me pregunta: "esto es lo que quieres"; mientras mueve de nuevo sus falanges y da con precisión en ese lugar glorioso. Ya no importa qué tan vergonzoso me escuche gimiendo. Gimo, jadeo, me muevo pidiendo más.