Introducción.

4 0 0
                                    

El viento hacía que los árboles se sacudieran con ligereza, la lluvia no sesó y menos aquellos relampagos que se rompían en el nublado cielo.

Era una noche bastante aterradora, muchas personas corrían a sus hogares, incluso habían algunos niños solos por las calles de aquella ciudad...

—¿Y?...

Interrogó aquel hombre con aspecto de seriedad, haciendo que me asustase un poco. ¿Cómo pude terminar en esta prisión?. Llevaba una vida normal, a punto de tomar mi último exámen para entrar a la universidad, ese día todo cambio para mí, incluso mi forma de ver el mundo.
~
~
~
~
6 de agosto de 1997.

Salía de casa animada por hacer ese exámen, ese exámen que se supone que cambiaría mi vida. ¿Quién iba a pensar que tendría que, por accidente presenciar aquello?, nunca olvidaré el aspecto de aquel hombre...esos ojos dorados, su cabello largo y rubio. Su mirada fría, sin mostrar ningúna clase de compasión. Ni siquiera se detuvo de hacer eso, ni siquiera cuando me vió, que estaba allí presenciando toda su artimaña tan cruel.

Opté por tomar un atajo, se me estaba haciendo un poco tarde después de todo. Miraba el cielo con una gran sonrisa, hasta que poco a poco se comenzó a nublar. Comencé a correr con todas mis fuerzas, no quería llegar toda empapada. Acto seguido escuché un grito de una mujer que provenía de uno de los muchos callejones que habían por esa zona, pensaba en seguir mi camino...pero no, maldita seas curiosidad.

Me gané detrás de un basurero y me asomé un poco para poder ver lo que sucedía, mis ojos se abrieron como plato. Poco a poco comencé a temblar cada vez más, no podía ni moverme. No podía creer lo que estaba observando, ese hombre le estaba arrancando la cabeza a esa mujer con sus propias manos. Mi mente tan solo decía "¡Corre!" pero mi cuerpo se negaba a reaccionar, me estremecí más en cuando noté que ese hombre me estaba mirando, ya no sabia si era un hombre, pero tenía la boca cubrida, tan solo se podían ver sus ojos dorados y totalmente, sin ningúna pisca de arrepentimiento. Llevaba una capa y una extraña máscara, acompañada por un sombrero.

Finalmente mi cuerpo reaccionó haciendo que saliera corriendo de ese lugar. De repente comenzaron a llegar muchas patrullas de policias apuntándome, me ordenaron poner mis manos hacia arriba, yo tan solo accedí sin antes comenzarles a gritar.

— ¡Se equivocan de persona!, ¡Yo no he sido!, ¡fue él...!

Apunté con mi dedo hacia el callejón, pero ya no había nada más que aquel cadaver, mis manos fueron esposadas sin remedio alguno, ¿por qué me tiene que pasar esto a mi?, esa persona...

¿Quién era?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 07, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

◆Silence◆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora