3. No es tan divertido

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POV Alec

Magnus me sostenía en brazos y abrió un portal, sabía que estaba enojado y que nos dirigíamos a nuestra casa.

En cuanto llegamos al loft, me dejo en el suelo y fue a servirse un buen vaso de coñac, si pudiera también haría lo mismo, aunque tengo la lucidez de mi mente adulta, no es fácil admitir que soy un niño pequeño

Comencé a hacerme preguntas sobre quien manejaría el instituto, como tomarían esto mis padres y el propio Magnus, ¿podría seguir amándome a pesar de todo esto? y lo mas importante, cuanto tiempo duraría esto.

Creo que Magnus no tomaría muy bien el que un niño de solo cinco años lo besara.

Me imagine subiéndome a sus piernas he intentando llevar a cabo mi cometido, lo lógico seria que me rechazara, así que preferí evitarlo, no quería sentir esa punzada que experimente solo de imaginarlo

Aunque Magnus me estaba prodigando ciertos mimos, no quería angustiarle más, se imaginan un niño con mente de adulto y enamorado de un brujo. Definitivamente no quería que entrara en pánico, así que hice lo que cualquier niño de cinco años haría: perseguir al gato.

- No Alexander, por favor, deja de jalarle la cola a presidente

Obviamente debía actuar como niño así que, recordando como actuaba Max a esa edad, abrí mis ojos como plato y me esforcé en hacer mi mejor puchero.

-¡Quiero jugar con el gatito! – exclame imitando a Max a esa edad.

Magnus apareció una serie de juguetes mundanos, e hice como que jugaba con ellos, necesitaba saber que ocurriría

Fue entonces cuando Magnus llamo a Catarina y Ragnor, se me hizo una buena idea ya que ellos siempre cooperaban con mi novio

Justo cuando iba a ponerlos al tanto pensé en divertirme un poco al ver sus caras cuando me vieran de ese tamaño; salí corriendo tras presidente y al ver a Cat corrí hacia ella y le mostré la lengua a Ragnor, debo admitir que no me cae muy bien.

-¡Magnus Bane!- el grito de Catarina me hizo recordar el pavor que Magnus le tiene, ¡ups! -¿Qué has hecho?, ¡tu novio!, ¡es un niño!

- ¡Wooow! – Fue la exclamación de Ragnor, quien a continuación saco su celular y comenzó a tomarme fotos, exclamando - ¡Esto lo debe saber Raphael!

Con un movimiento Magnus le quito el celular de Ragnor – ¡ni te atrevas a decirle nada a Raphael a menos que quieras aparecer en medio del mar de las bermudas en un barco lleno de guano fresco!

Eso me hizo sonreír, había leído lo que paso en Perú en el cuaderno de Magnus.

Mientra Cat me alzaba, Mags los ponia al tanto, fue entonces cuando observe su mirada me hacía sentir incomodo, parecía que ella sospechaba algo

-Sería una buena idea ver si su mente también regreso a la edad que su cuerpo aparenta- sugirió Cat

Oh no, lo sabia, Catarina es muy inteligente, bueno más bien observadora y esto se debe a su trabajo de enfermera. Solo espero que no me descubra.

-Discúlpame – escuche que decia Magnus- pero en este momento es lo último que me preocupa, quiero recuperar a mi novio, en su edad real, o tendré que esperar otros catorce años para poder estar con él y no pienso arriesgarme a que Maryse me separe de el .

¿Qué? ¿Tanto tiempo sin besar a Magnus o tener intimidad con el? No había pensado en eso y mi novio tiene razón, si mi madre se entera aprovecharía el momento para separarme de el. Por el ángel, no había pensado en nada de eso. Estoy en problemas.

-Suerte con la pubertad- dijo entre risas Ragnor.

Maldito Ragnor, no quiero pasar por eso otra vez. No me gusta la violencia, pero juro que golpearía a Ragnor, pero debo seguir en mi papel, no quiero angustiar mas a mi novio aunque en este momento me encuentro aterrado. ¿Y si Magnus no encuentra una solución?, ¿y si me alejan de el? O peor aun ¿ y si deja de amarme?

-A que yo jamás había visto algo como esto- contesto Ragnor.

-En realidad yo tampoco había visto algo como esto querido- secundo Cat.

-Entonces ¿Qué voy a hacer?, ¿a quién podría acudir para consultar esto? – pregunto Magnus mientras se pasaba una mano por la cabeza, yo también quería saberlo

-Pues........Yo sé de una persona que es más vieja que nosotros y tal vez ella si ha visto algo como esto, - dijo con una sonrisa torcida Ragnor, creo que estaba disfrutando esto. - aunque claro, Magnus tendrás que usar toooodo tu carisma para convencerla de que venga y ayude.

Catarina y Magnus se miraron uno al otro, yo comprendí inmediatamente a quien se refería Ragnor y no me hacia ninguna gracia tenerla aquí ahora que yo era un niño.

-¡Nooo! – Exclamaron al unísono - ¡ella no!

-Sí, saben a quién me refiero. Dijo Ragnor

Camille.

Odio a esa vampiresa, por su causa estuve a punto de perder a Magnus y ahora el tenía que acudir a ella para obtener información sobre como revertir este caos.

Juro que en cuanto vuelva a la normalidad le pedire a Jace le juege una broma Ragnor, realmente creo que disfruta vernos a Magnus y a mí en problemas.





Ok, el día de hoy son dos capítulos debido a que ayer por la lluvia no lo pude hacer. En el lugar donde vivo hubo tormenta eléctrica y se fue la luz, así que espero que les guste.

Voten por favor si les gusta y como digo, acepto criticas constructivas y sugerencias. Feliz fin de semana.

Mi pequeño nephilim (Malec)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora