Capítulo 1

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• 17 de Enero (2018)

Hoy es un día cualquiera, me suena el despertador a las 7:30 indicandome que me tengo que levantar para ir a clases.

Me levanto, bajo las escaleras y me encuentro a mis padres y mi hermano desayunando.

- Padre: Buenos días mi niña - me da un beso en la frente

- Yo: Buenos días

- Bruno: ¿Te llevo a clase?

- Yo: Si no te importa prefiero ir andando

Bruno me sonríe como respuesta, tiene una sonrisa realmente irresistible, no se que hace que no tiene novia ya.

- Madre: Siéntate que ahora te pongo las tortitas - me sonríe

Me las sirve y la doy las gracias.

- Yo: Si me perdonaís voy a ir a cambiarme.

Me sonríe mi padre como respuesta asintiendo con la cabeza.

Subo, me pongo un jersey rojo, unos pantalones azules con dos rayas a cada lado de color rojo y negro y mis victoria negras junto con mi abrigo gris.

Me meto en el baño, me lavo la cara, me cepillo los dientes, me peino el pelo y me echo cacao.

Cojo la mochila, voy a la cocina a por algo de merienda y me voy.

Saco el móvil, me pongo los cascos y pongo la canción preferida de ella y mía.

Cuando alguien se choca contra mí, haciendo que me caiga de culo.

- Desconocido: Lo siento muchísimo - me da la mano para levantarme

- Yo: La próxima ves podría ir con más cuidado

- Jesús: Soy Jesús encantado - me ofrece su mano

- Yo: Nadie le ha preguntado, pero bueno es saberlo, Bella - le doy la mano

- Jesús: Es usted muy borde  - me sonríe

Vaya sonrisa tiene, volvería loca a cualquier chica.

- Yo: Discúlpeme, pero llego tarde a clase

- Jesús: Espero verla pronto - me sonríe y se va

Llego a clase justo cuando toca el timbre y entro muy rápido a clase.

- Profesora: Buenos días alumnos, Ella es Bella una nueva alumna que ha llegado, siéntese al lado de Jesús Oviedo.

Me fijo al final de la clase y le veo a él sonriente.

Voy andando, cuando un chico me para y me dice demasiado guapa para estar aquí, a lo que yo le respondo poco cabeza para sujetar ese pelo y todos lo abuchean.

Llego a mi sitio, dónde me encuentro a Jesús riendo.

- Jesús: Bella, dulce bella - sonríe

- Yo: Buenos días

Vaya dice alguien girandose

- Daniel: Daniel encantada, la primera que no le devuelve el piropo a mi hermano.

- Yo: Bella igualmente - me encojo de hombros

Se gira la compañera de Daniel

He de decir que tanto Jesús como Daniel, son bastante atractivos y la chica que se acaba de girar también, es castaña con unos ojos verdosos preciosos.

- Gala: Gala encantada - sonríe

- Yo: Igualmente

- Daniel: ¿Porque no sonríes?

- Yo: No todo en esta vida se resuelve con una sonrisa.

La profesora nos manda callar diciendo que las presentaciones para el patio y deja a los chicos descancertados.

Suena el timbre, dando paso al recreo.

Salgo de clase dispuesta a irme,pero alguien me coje del brazo, es Daniel.

- Daniel: Vente con nosotros - sonríe

- Yo: Esta bien

Llegamos hasta donde estan todos y me siento entre Jesús y Gala.

- Daniel: Ella es Bella - sonríe

- Jesús: Ellos son, Hugo, un chico moreno con ojos color miel, Elena, morena con rizos y ojos marrones, David, moreno con unos ojos marrones enormes, Javier moreno con el pelo rizado y ojos marrones y Andrea, rubia con el pelo liso y ojos marrones.

- Yo: Encantada - intentando sonreír pero me salió una mueca

- Hugo: Igualmente preciosa -sonríe

¿Qué pasa que aquí todo el mundo sonríe y tiene una sonrisa irresistible?

- Elena y Andrea: Igualmente guapa - sonríen

- Javier: Igualmente nena - sonríe

- David: ¿Porque no sonríes?

- Yo: ¿Porque debería hacerlo?

- David: Porque la vida son dos días y no te puedes pasar tres amargado, ¿no?

- Yo: Supongo que llevarás razón, pero a mí no me sale sonreír, lo siento

- Jesús: No te preocupes bonita - sonríe

Ellos se ponen a hablar y uno de ellos me pregunta algo

- Hugo: ¿Siempre has sido así de borde? - ríe arrogante

- Yo: ¿Tú siempre has sido así de arrogante?

- Hugo: Irritante

- Yo: ¿Y para que me hablas entonces?

Antes de que pueda responder suena el timbre. Las siguientes horas se me pasan muy rápido y al salir veo el coche de mi hermano y me subo.

- Bruno: ¿Que tal todo renacuaja? - sonríe

- Yo: Sin más, como siempre

Él asiente y llegamos a casa muy rápido.

Subo a dejar la mochila y vuelvo a bajar para poder ir a comer.

Como de costumbre estamos Bruno y yo sólos, él dentro de poco se va a volver a ir, acabamos de comer me da un beso en la frente, me dice que ten cuidado y se va.

La tarde pasa, me quedó dormida mientras miro la televisión.



• Espero que os haya gustado.



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