Un sombrero en Bohemia

Capítulo 3 - Maltrato

- Ufff... Ay, mi cabeza, me duele. - dijo Zdenka - ¿Por que me dolerá tanto?

- ¿Esta bien?, señora

- Me duele la cabeza a horrores, no me acuerdo de lo que pasó ayer ¿lo sabes tú?

- ..., no...

- ¿Y esa pausa?

- ¿Que tiene de extraña? - dijo Sofía

- Que muestra indecisión. Da igual, me duele la cabeza demasiado.

Zdenka se dirigió a el baño para asearse.

- ¡¡¡Ahhhh!!!, ¡¿Y esto?! - dijo Zdenka al comprobar que tenía un moratón en su pómulo derecho.

- Sofía, cuentame ahora mismo lo que pasó ayer.

- Yo... Usted, ayer se golpeó con un corcho de botella de Champagne, cuando la abría.

- ¿Y me hice esto, sólo por ese golpe?

- Si, señora - dijo Sofía con voz temblorosa

- ¡¡Mira, Sofía, no se que esta pasando ni porqué me ocultas algo, pero pienso llegar a el fondo de todo esto!!

- Señora, usted... se está comportando de manera inusual.

- Yo... Lo siento Sofía, me duele mucho la cabeza, tomate el día libre.

- Muy bien pero déjeme terminar lo que estaba haciendo.

Media hora después

- Cariño, ya llegue

- Hola, Bartoloměj - dijo Sofía

- Sofía, preparame la comida... qn¡Sofía!

- Sofía no esta.

- ¿Por que?

- Le di el día libre porque le hice pasar un mal rato.

- ¡¿Como?!, ¡ya le diste día libre en su cumpleaños y ahora por una chorrada de estas!

- Es una persona

- ¡Que trabaja de eso! - replicó Bartoloměj - Estoy harto de que malgastes mi dinero.

- ¡¿Como?! ¡¿Tu dinero?! Oye, perdona pero soy yo quien trae el dinero a casa, tu no trabajas.

- Oye, niñata.

- ¡¿Que?! - le interrumpió Zdenka - ¡¿Como dices!?

La mente de Zdenka empezó a recordar lo que pasó añoche:

- Zdenka, ya llegue - dijo Bartoloměj

- Hola, cariño

- Necesito 500€

- ¿Para?

- Porque los necesito y punto

- Es para apostar, ¿verdad? - dijo Zdenka

- Cállate, niñata

Fin del flashback

- Tú - dijo Zdenka - tu me maltratas, sufro violencia de género por tu parte. Tu me hiciste esto en mi pómulo derecho, tu eres zurdo, y cuando me golpeas lo haces en mi lado derecho.

- ¿Y que?

- Que es ilegal, tengo una prueba en mi cara. ¡Estas perdido!

- Yo... Zdenka perdóname

- ¡No!

Cinco minutos después llegó la policía y se llevaban a Bartoloměj.

- Zdenka, yo te quería - dijo Bartoloměj

- No, tu sólo querías mi dinero, mi empresa, no me importas nada ya.

- Pero Zdenka, yo...

- Adiós Bartoloměj