"Mi dolce vita"

Capitulo 1

¿Me baño?, ¿No me baño?, Tomé una ducha ayer en la mañana, ¿no?, así que si no la tomó hoy, serían como dos días de no acerase, ¿Y si la tomó hoy en la noche?, No, se van a dar cuenta, ¿Ayer la tomé en la noche o en la mañana?

-¡Colucci!, ¡¿Ayer, a qué hora me bañé?!- Mi voz salió como gallo, ya que era lo primero que decía en todo el día.

-¡En la noche!

Genial. Me levanté hacia el armario tratando de abrir bien los ojos. Hoy era nuestro primer día de clases del cuarto y penúltimo año de universidad. Yo estoy estudiando arquitectura, y hoy empieza el séptimo semestre, de diez. En serio, esto tiene que valer la pena. A Erika solo le falta esté año y un semestre más, ella se quiere graduar como Licenciada en emprendimiento cultural y social, yo elegí algo mucho más sencillo.

Decidí ponerme unos pantalones de mezclilla, una camisa sin estampado color negra, un suéter color marrón con algo de brillos, y mis botas de agujeta cafés.

Ya vestida me lavé la cara y peine, luego me dispuse a maquillarme.

Ya lista bajé corriendo la escalera, como el departamento es tan pequeño solo tiene una habitación, pero como nosotras estamos en el último piso, hay unas escaleras que dan a la azotea para que cuelgues la ropa, subiéndolas hay un pequeño cuarto donde, se supone, debería estar la lavadora y así, pero pues #YOLO ahí duermo yo, es pequeño, solo cabe mi cama, mi armario, y un pequeño lavabo donde amontono todas mis cremas, maquillajes, etc.

-¡Oye!- Erika abrió la puerta de su cuarto justo enfrente de mi cara, a lo que yo grité. Le iba a decir algo, pero ella me interrumpió.

- ¿Vans o botines?- Me les quede viendo un rato, ella vestía toda de negro. Los vans eran negros con motas blancas y los botines morados, no muy altos y con pelitos.

-¿Mmm?, los vans son lindos, pero me gustan los botines- ella sólo me dio las gracias y se metió de nuevo al cuarto.

Yo seguí mi camino hacia la cocina dónde saque un plato hondo, un litro de leche y cereal, ah y una cuchara.

Estaba comiendo mi cereal de bolitas más bien deformes color amarillo, cuando llegó mi amiga.

-¿Flats?- le pregunté, así es, no llevaba ni botines ni vans, llevaba flats, apropósito, unos muy bonitos color naranja con líneas de colores, pero sin charol.

-Sí, decidí que con botines era muy formal, hoy no me sentía como para usar vans y con converse muy informal, ¿Oye y mi desayuno?

-Yo que sé

-No me hiciste, limón agrio- Así me decía ella, era como un apodo, nunca supe porque.

-No soy tu chacha

-Podrías ser más tierna, ya que, soy la única que te soportó.

-Estás en las mismas

-No es cierto ese chico Dan me soporta, hablando de eso, tienes nuevo compañero para el equipo “anuario”- Agh, ese maldito trabajo. Un día estúpidamente me inscribí para ayudar a hacer el anuario de los que salían esté año, tras una súplica de mi maestro del curso de verano para aprender fotografía que tome en la uni. Nadie quería hacer el anuario, eras propenso a morir en un asalto, ya que prácticamente llevas la cámara todo el tiempo, y por flojera.

-No me digas que es él por favor- ese tal Daniel me irritaba.

- Si, y su primo Leo

Creo que a él lo conozco, si no me equivoco, él estudia… algo en el edificio de al lado.

-¿Voy a hacer contacto con ellos?- pregunté

-Por lo que me contó Dan, con el no, pero con Leo sí, el será tu nuevo adjunto.

Así que voy a tener un nuevo asistente; en primera se supone que yo no debería tener seleccionado a un adjunto, ya que solo tomé un curso de verano, no estoy estudiando fotografía ni nada por estilo, la verdad es que soy muy mala en eso, de hecho ni siquiera tengo cámara, la que me dieron para el anuario es prestada.

-Colucci, ¿No Leo debería ser el adjunto de Dani?, digo, yo no puedo tener uno ¿o sí?- ella río levemente y luego me dijo:

-Veras, lo que pasa es que DAN- dijo remarcando su nombre, yo le digo Dani porque es un marica (no en el sentido de que sea homosexual) y porque le molesta- no quiere a Leo como asistente, dice que solo lo distrae y se aprovecha de él.

-Así que me lo pasa a mí, muy valiente de su parte, aunque viéndolo por el buen sentido resultará divertido, no siempre te regalan un esclavo- dije mientras me encogía de hombros y terminaba mi cereal, me paré y me dirigí hacia mi mochila, pero una voz me interrumpió.

-¡Eh, eh!, tu plato.

Chasquee los dedos mientras fruncía mi cara y giraba sobre mis talones, levantarlo significaba lavarlo.

&

Erika estaciono nuestro ka en la esquina.

-¿En serio?, ¿Por qué nunca alcanzamos lugar en el estacionamiento de la universidad?-pregunté irritada, habíamos llegado solo un poco tarde porqué me demoré tantito en lavar mi plato, y cuando por fin arribamos no había lugar y a Colucci se le ocurrió irse hasta la esquina porque dice que si lo estaciona en frente es probable que lo choquen.

-Tú fuiste a la que se le ocurrió buscar más de mil excusas para no lavar tu trasto y enjaretármelo a mí, así que en mi defensa, fue tu culpa.

Iba a bufar, pero era cierto, así que nada más hice un más o menos con mi mano y mi cabeza al mismo tiempo que le sonreía a mi amiga, ella solo negó y empezamos a caminar hacia la escuela. Al llegar Erika hizo una seña hacia donde se encontraba Dani, y nos encaminamos hacia ahí, supongo que me presentaría a mi nuevo asistente.

-¡Hola Ann!- ¿Ann, en serio?, este tipo sí que le hubiera gustado tener un nombre gringo, mi amiga y él se dieron un beso en la mejilla, yo me sigo preguntando como es que ella lo soporta.

-Lina- dijo mientras asentía en mi dirección, yo hice exactamente lo mismo pero diciendo “Dani”, él se masajeo la sien frustrado y me respondió:

-¿Cuántas veces te lo tengo que repetir?, Dime Dan

Yo le sonreí dulcemente y luego le dije: -No

El me miro cansado y se volteo a hablar con Erika cuando llegó un chico. Era delgado y con chinos escurridos color negro, su cara era como un rectángulo y no era muy alto, me sacaba poco menos de media cabeza, pero era apuesto.

-Ah, Lina él es Leo, tu nuevo adjunto- me dijo Dan. Ese tal Leo era bastante más guapo de lo que recordaba, en fin, yo solo asentí mientras lo inspeccionaba y sonreía, el solo tenía una pequeña sonrisa.

-Mucho gusto en conocerte.

-Igualmente- dije mientras estrechábamos manos.

-Bueno te explico, como eres mi nuevo asistente pero estudias otra carrera en otro edificio, solo estaremos juntos en el receso largo y las clases libres que coincidan, además nos vamos a colar como staff en algún taller ridículo para captar imágenes interesantes, luego todos los martes, jueves y viernes nos quedaremos en la tarde hasta las seis y media en el espacio que nos den para organizar el anuario y después me llevaras a casa- le expliqué lentamente, el abrió la boca para decir algo pero yo lo interrumpí.

-En el receso tendrás tiempo para expresarte, por el momento Colucci y yo tenemos que irnos a nuestros respectivos salones.- dije y empecé a caminar.

-Espera- me dijo Leo- Según lo que acabo de entender, ¿Estaremos juntos todos los días en nuestros recesos largos y clases libres, y luego me voy a tener que meter contigo a un taller?

-Te falto entender que solo te puedes expresar en el receso- dije mientras me volteaba y continuaba con mi camino. Pero alcance a oír como él susurraba: “genial”