LA VITA É
Dejo caer la cabeza
Y me permito verte
Después de tanto tiempo
Veo tu reflejo en el charco de agua
Me cautiva hasta el punto de volver
Al segundo que le da sentido a lo vivido
Al punto en el espacio tiempo
Que te vi por primera vez
Al momento en que me hechizaste
Miro al cielo, la lluvia golpea mi rostro
Con una sutil caricia celestial
Sonrió ante el recuerdo del pasado
Es en estos momentos cuando sale a flote
La romántica empedernida que llevo
Y me permito decir a tu recuerdo
Fue la esencia o la presencia
La que me enamoro de ti
Es un gran enigma
Poseer cada parte de ti
Es un deseo que llena
Mis entrañas
Y que genera en mí
Los más diversos
Prohibidos e indebidos deseos
Quiero tomar tu ser
Aunque pareciese no ser suficiente
Adorar y devorar cada centímetro
Mis dedos queman del deseo al sentir
El vibrar de cada minúsculo centímetro
De tu piel reconocerme como dueño
Me avergüenzo de mis pasiones
Pero no puedo evitar pensar
Que contigo es correcto
De solo pensarlo me estremezco
Mi cuerpo me abandona
Y te corresponde como igual
Es amor
Tan casto como perverso,
Del que se sella con un para siempre
Me abruma
Esta sensación de necesidad
Frente a otro
Solo tú puedes ejercer con fuerza
Tal acto de confianza, de la mendiga mujer
Que regale su corazón a otro
Del mismo modo te pido
Una simple mirada
Para poder reanudar mi respiración
Podre ser libre
De abandonarme sin culpa,
A una simple, caricia tuya.
Deambulas en los rincones de mi mente
Al límite de la felicidad
O quedar preso en la soledad
Quiéreme por quien soy
Y no por ser la chica
Que escribe estas líneas
Si tuvieras noción
Sabrías que quiero ser la razón
Y la dueña de tus desvelos
Quiero arrancarte, mi corazón arde al intento
Y pelea consigo mismo, no es fácil aceptar
Que eres un león en extinción
Renunciar no es opción
No hay hombre o mujer
Que viva sin amor, sin esperanza.
Te esperare
Hasta que caiga la última hoja
De aquel árbol del pasado otoño
Déjame ser
La que limpie tus cicatrices
Una a una de extremo a extremo
Quiero que seas mío
Sin rastro de pudor
Mi segunda piel
Te concedo el derecho
De acreditarte mi locura
Y reprobarme en filosofía
Que seas mi profesor
Mata y condena a lo prohibido,
Es esto lo que más me gusta de ti.
LA VITA É
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Colección Poemas
PoesíaCuando estoy triste escribo poemas. ¿Qué hago cuando estoy feliz?
