*ૢ✧candy min 〘ᴋᴏᴏᴋɢɪ/ʏᴏᴏɴᴋᴏᴏᴋ〙

ċєяєzѧ

Hmg - se acercó más a los labios de su hyung

Los dos estaban el la habitación de paredes blancas sutilmente decorada con un azul con lo muebles azul cielo,la madre del mayor les había dicho que había comprado dulces los cuales había dejado en la habitación de Yoongi

Kookie - suspiro, lamio con su propia lengua sus labios. Estaban hinchados

Uno más hyung - se acercó- por favor

Tomo un pequeño dulce de cereza, se desizo de la envoltura, esperando la respuesta del pálido se mantuvo quieto.

Está bien - relamió sus labios- uno, el último

Sip - colocó el dulce en los labios ajenos

Con delicadeza se acercó a la cara del pálido tomando sus mejillas en el proceso.

Ambos se encontraban en el suelo, Yoongi estaba apoyado en lo que quedaba de la cama, Jungkook se encontraba entre sus piernas.

Estampó sus labios , saboreando al instante el dice que se encontraba entre los delgados labios del contrario.

Eran unos niños que solo disfrutaban del agradable sabor de los dulces.

Suspiro mientras tomaba de los cabellos al más pequeño, sus labios estaban siendo cruelmente tomados por el castaño, se atrevió a separarse un poco. Ahora Jungkook era quien tenía el preciado dulce de cereza

Se levantó un poco atrajo al más bajo a su regazo, los ojitos de la otro están cristalizados, sus mejillas con un lindo risa pálido en ella y sus labios, cada vez más tentadores.

Con su dedo índice acaricio los labios de el pequeño Kookie, después lamió el dulce que había quedado en el.

Hyung - suspiró

Lo tomo de los hombros y volvió a estampar sus labios.

No pudo detenerle, el pequeño dulce se movía entre sus labios. Jugando con el dulce, rozando con su lengua los delgados labios.

¡Niños bajen! - y eso fue suficiente para que se separarán

Dejado los labios de su hyung en paz se alejó un poco del pálido rostro.

¿Esto está bien? - sus manos no se retiraron de los hombros de Yoongi

La verdad no lo sé - le miró directo a los ojos- pero no me importa

A mí tampoco - sonrió- siempre y cuando me dejé provar todos sus dulces

Una sonrisa fue su respuesta. Kookie se acercó a los labios de su hyung, saco la lengua y lamió todo los rastros de dulce que habían quedado impregnado en los delgados e hinchados labios de su único y especial hyung

Ambos se levantaron, recogieron las envolturas de dulce del piso, las tiraron en el bote de basura que se encontraba en la esquina del cuarto.

¿Que pasa mamá? - le miró desde las escaleras

A llegado la pizza -les mostro la caja- vamos llama a Jungkook

Sip - subió las escaleras corriendo

Su madre grito que podría caerse lo que le hizo aumentar la velocidad.

¿Había algo de malo en que a los dos les gustan tanto los dulces?

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