CHARLIE BROWN

El golpe.

          

Dolía verla, en serio me dolía, me dolía ver como caminaba sin notar mi presencia, me dolía ver como una bola de imbéciles la trataba bien, solo para conseguir que se acostaran con ella, me dolía incluso ser a la última persona que le hablaría.

¡Alexander! Ponga atención, exclamo la maestra...

A veces, suelo perderme en clase por culpa de ella, si he estado enamorado de Kamila desde primero de prepa, pero como esa chica popular, de promedio alto, se iba a fijar en mí, en un perdedor de primera, que no le habla a nadie en su clase  más que a su maestra.

Esta es mi historia, ¿es una historia de amor?, parecería que sí, eso hubiera querido, pero poco a poco verán la historia entre Kamila y yo.

Era hora del receso, Kamila caminaba con su grupo de amigos, todos eran unos patanes, unos estúpidos que le faltaban el respeto a cualquier persona, y se creían superiores a los demás, se me figuraban así como a los sujetos de Vaselina, aja, esa película de los 80's

Y... yo, pues era el típico sujeto de cada clase, alejado de la sociedad, solo tenía a un amigo en la escuela, Aldo, un tipo tampoco muy popular, pero por lo menos tenia novia.

Aldo y no nos hicimos amigos desde hace ya dos años, cuando descubrimos que teníamos gustos similares y compartíamos algunas ideologías, y bueno, entre otras cosas.

Lo busque en el receso, Aldo es de cabello chino, así que nunca ha sido muy difícil encontrarlo, pero en esta ocasión llevaba un gorro mostaza, me percate que  estaba allá en la cooperativa, sentado con su novia, Emily, me acerque a él y me dijo: "¡Hey Alex! ¿Qué hay viejo?

Me senté alado de ellos, no espere incomodarlos, porque también le hablaba bien a Emily, y les comente lo que me había pasado, al respecto con mi pensamiento que tuve con Kamila, Aldo me dijo: "Enano, si tu deseo es hablarle, deberías de hacerlo"  ¿Pero? De donde iba a sacar el valor y la fuerza para hablarle a Kamila, nunca se me había dado ser sociable con las personas y hablarle a Kamila, diablos, sería todo un gran reto.

Es que amigo, y si me rechaza, o simplemente se burla de mi o le dice a los Patanes?

No creo que esa chica sea capaz de hacer eso y si le dice a eso imbéciles, tu no tengas miedo, deja que te hagan algo y me las van a pagar.

Jajaja, diablos, no quisiera ver eso.- dijo Emily sarcásticamente

Sonó la campana que indicaba el regreso a las clases.

Bueno, Alex, suerte con eso y sin miedo.

Regrese del receso, y me senté en la banca en donde se sentaba un amigo de Kamila que por cierto era líder de la banda de "Los Patanes". La maestra aún no llegaba y Aníbal, el chico que se sentaba donde yo me senté, me miro con una cara intimidante, pero lo ignore y me dijo:

-¡Muévete basura!-

Yo no respondí, así que volvió a insistir y  al ver que yo no respondía, nada el me levanto de la playera y me coloco un golpe en el ojo derecho y caí desvanecido.

Todos se levantaron y Kamila le grito a Aníbal:

¿Qué te pasa? –

¿Estás bien? – Me dijo

Creo que estas palabras bastaron para que el dolor de ojo se me olvidara. Me levante del suelo

-Ahora tienes que cuidarte ese ojo, probablemente se ponga morado por la magnitud del golpe- me sonrió Kamila

La maestra Bisognio regreso al salón y comenzó a dar su clase, pero no dejaba de pensar en que gracias al golpe de Aníbal, Kamila me hablo. Acabaron las clases y Kamila se fue con los "Patanes", y Aldo se fue con Emily, entonces saque mis audífonos y puse mi música  sé que parece muy exagerado todo esto, pero ya hacía tiempo que quería que Kamila y yo conversáramos ya sea un poco.

4 minutos después le llame a Aldo y le conté de lo que me había pasado, su primera reacción fue en preguntarme que si estaba bien, le insistí que sí, también me comento que lo tomara con calma, que ahora que Kamila me hablo, me tocaba a mi hablarle a ella. Aunque bueno, me hablo por accidente, ya que fue por el golpe que me propino Anibal, como ya lo dije, todos en esa banda son unos salvajes.

Llegue a casa y mis familiares estaban comiendo, me saludaron y al mismo tiempo se asombraron por mi ojo, que ya estaba morado, yo, de la emoción por lo sucedido no me acordaba, tuve que decirles que en la clase de deportes recibí un balonazo en la cara y esa era la razón del golpe, después de que acabe de comer, subí a mi cuarto y comencé a hacer mi tarea, soy de esas personas que entiendes más estudiando las cosas por si solo, que cuando las explican los profesores, de repente entro mi mamá, que recién llegaba de trabajar, lo primero que me dijo fue que, que me había pasado en el ojo. A mi madre no le podría mentir, así que le dije lo que me había pasado y de lo feliz que estaba por que Kamila me había hablado. Me sonrió, me miro a los ojos y me dijo:

-Hijo, eres muy joven, no te apresures a algo que a lo mejor solo fue una charla, no quiero que salgas lastimado, fíjate bien a quien eliges, a veces solo son palabras-

Al poco rato, ella fue a la cocina y me trajo una carne congelada para desinflamar el ojo que por cierto, parecía un pez globo. Termine la tarea, me lave los dientes, y me dirigí a la cama, lo único que quería esa noche era soñar con Kamila.