Mi vida pedía lujos y riquezas, y en la orilla de la creación te encontré, felicidad.
Mi pensamiento naufraga en tu sonrisa y mi corazón se ahoga en un mar de emociones, ya que perversos me matarían por ser feliz.
No sé si olvidarte o conservarte. Para mi eres importante y ahí nace la interrogante.
Tesoro de los siete mares, te liberaré en el barco más lujoso que pueda construir y en él navegues buscando al que te sepa valorar.
Vive y se feliz, que yo seré el viejo marino que busque la aventura que lo lleve a navegar los cielos, con la esperanza de verte en el firmamento.
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Tu amor fue Canela, olía a dulzura, pero supo a amargura
PoetryPoemario con azúcar al gusto y disgusto también