"Belleza"

860 29 29
                                    


Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, estos son totalmente de la obra Tokyo Ghoul:re de Ishida Sui.

Este fanfic es totalmente de mi autoria, basándome en la obra de Tokyo Ghoul:re, favor de no resubir y solo compartir.

Advertencia: Esta historia contiene spoilers del manga de Tokyo Ghoul:re ya que la trama principal se desarrolla a partir de capítulo 162 del manga.

...........................................................................................................................................................


Capítulo 3


De alguna manera Mutsuki quería creer que podía aceptar ser rechazada, ella imaginaba que si su vida fuera una historia esta no tendría un final feliz porque ella no era el héroe, tampoco era la princesa que necesitaba ser rescatada de un apuro, quizá el villano era el papel que se adecuaba más a ella, porque ella había hecho cosas malas y como en toda historia, el villano era odiado e incomprendido, si, quizá ese era su lugar en la historia, ya que los villanos jamás terminaban teniendo un final feliz, ellos no merecían ser felices y pero tampoco podía ocultar que muy en el fondo ella si deseaba que su historia tuviera un buen desenlace, ella quería ser la princesa, porque estas eran hermosas y su amor siempre era correspondido por el hombre que ellas amaban, definitivamente algo así es algo que ella desearía, porque había estado persiguiendo la oportunidad de estar con el hombre por quien tenía profundos sentimientos, sin embargo en su caso, se había terminado resignando a que este no le correspondería jamás y quería aceptar la idea que por más que buscara extender su mano para alcanzar a su mentor jamás lograría alcanzarlo, ni ella, ni sus sentimientos y aunque lo hiciera este nunca la vería con los mismos ojos de amor que le dedicaba a aquella mujer, ni él ni nadie, era allí donde no podía evitar llegar a las comparativas, el hecho de que ella para empezar era una hembra repugnante, sin rastro de genuina belleza o alguna característica que valiera la pena para que pudiera considerarse mujer sin que se sintiera hastiada de sí misma, eran estas mismos pensamientos los que la atemorizaban, y la llevaban a concluir que la idea del rechazo ahora se la replanteaba en lo profundo de su mente como algo que le dolería, así que no podía permitir ser expuesta, ni ahora, ni nunca y eso incluía que no le permitiría a Urie que la viera en ese estado tan deplorable, cuando ya estaba tan rota, no podía ser vista como la mujer defectuosa que era.

La chica de cabellera blanquecina se mantuvo con la espalda contra la puerta de salida, mientras cerraba sus ojos con fuerza y llevaba sus manos a cubrir sus oídos, como si hacer esto de algún modo la desconectara de la realidad, totalmente vulnerable y sin saber qué hacer, fue hasta entonces que sintió el tenue agarre sobre una de sus muñecas, fue esto lo que la haría abrir sus ojos abruptamente notando como Urie hacía desaparecer la distancia entre ellos una vez más, se le quedó mirando buscando el odio y el rencor en su mirada pero no había rastros de tales sentimientos en aquellos ojos que siempre le pareció conservaban un deje de frialdad y soberbia, pero incluso no podía ver nada de eso en Urie, tampoco era lástima o compasión, le resultaba indescifrable porque estaba tan confundida como para darle un nombre a sea lo que sea que apreciaba en la mirada del chico de los lunares quien inesperadamente uso su mano libre para despejar la frente de la morena de su flequillo para posar sus labios sobre la zona, un inocente contacto, aquel breve beso había dejado consternada a su ex compañera de escuadra.

—¿Eres idiota acaso? Yo no pienso tales tonterías sobre ti, es verdad que jamás te he visto más allá de lo que escondes debajo de tu ropa y desconozco muchas cosas sobre ti, pero yo he decidido aceptarte tal y como eres, porque sé que eres mujer, sé que eres fuerte, sé que has sufrido, sé lo que hiciste y sé que estas arrepentida y he decidido perdonarte, he decidido....—sus palabras se detuvieron en su garganta imposibilitado de articular lo que tenía en la mente y lo que por algún tiempo había resguardado en su corazón— he decidido que quiero quererte.

"Fragmentos de un alma resignada"Where stories live. Discover now