Era un día de verano en donde iba a estudiar a una academia que estaba dentro de la universidad para poder acceder a estudiar en ella. Yo no era de esas chicas que se maquillaban o hacían cualquier cosa para parecer popular; es más, a mí me gustaba ser tranquila, llamar la atención de ninguna forma y era raro que alguien se atreviera a hablarme, porque siempre cuando lo hacían yo no era capaz de responderle. Casi siempre fui así, hasta mi fama se redujo al nombre "La chica que no habla", dentro del colegio, claro está.
Lo que todos ignoran es que no siempre fui así; mi familia me hizo así, al demostrarle la mayor parte de la atención a mi hermano pequeño, el cual demostraba una inteligencia sorprendente y ellos trataban de igualarme a él, siendo que no podía, y con esa excusa iba a la academia, para seguir estudiando, y relajarme de ese ambiente hostil, desagradable que incitaba a sacar el mounstruo, el lado oscuro, el cual habitaba dentro de mí, y el cual todos ignoraban.
Como fue la primera vez que la visitaba me bajé del autobus, sola, como siempre, estaba habituada a ese vacío y caminé hasta dentro del recinto. Solté un suspito al ver la inmensidad del lugar y me resigné a caminar para llegar a las salas seguidas por una muchedumbre que aparentemente iban junto conmigo. La seguí para poder ubicarme en la inmensidad del lugar, pero al avanzar me dí cuenta que se dispersaban por diferentes lugares y lancé un murmullo apenas oído como un susurro
-¿Y ahora qué hago?
Como lo supuse, nadie lo oyó ni me auxilió, pero a lo lejos vi un letrero que indicaba donde tenía que ir, el principio de un fin, creía, pero el destino tenía otra cosa preparada para mí.
"Bienvenidos a la academia de Chifuestudios"
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Mi chico perfecto
RomanceÉl era diferente a los demás, él me quería y eso bastaba Dudaba ir a esa escuela mis días libres, pero ¿qué? No tenía nada que perder, si era yo, no iba a encajar con nadie, pero puede haber alguien que me haga cambiar de visión. Que pueda lidiar co...
