En mi casa...

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-¿Por qué llegas tan tarde?

-Tenía que pasar tiempo con mis amigas - dije

-Llamé a tus amigas y me dijeron que no estabas con ellas. Es más, ni siquiera sabían que ibas a salir - Me retó

-Ellas no fueron, no fue mi culpa

-Ah sí, entonces ¿Por qué mentiste?, estás castigada.

-Eso es injusto

-Sin celular entonces

¿¡QUÉ!?

-Ok- me resigné

Le pasé mi celular, mi amado celular, a ella, y me fui a mi pieza. Volví a llorar ¿Cómo me comunicaría con Darío ahora?

-Vale, ¿Qué pasa? - Oí a mi hermano

-Nada, estoy bien

-¿Segura? 

-Sí - Traté de calmarme

 Me abrazó y se fue.

-¡A comeer! - Llamó mi mamá

Me limpié con lo que tenía a mi alcance y fui al baño para limpiarme la lagrimas que aún no salían. Sabía que sí o sí tenía que bajar... y comer. Luego de ver que estaba bien, lancé un grito de "Ya voy" tratando que no se me quiebre la voz.

Comiendo solamente me resigné a comer poco, ya que no tenía ganas de comer, aunque mi estómago rugiera. Esparcí la comida en el plato como lo leí en un blog Pro-Ana, en uno de sus cuantos tips para adelgazar. La comida transcurrió en silencio, tal como esperaba. Recogí mi comida y se la di a mi perrita, ella comió gustosa y yo me fui a acostar, con un buen libro en la mano.

NA. 

¿Es muy tarde para hacer una? :c Sorry por no actualizar. Me estaba castigando con no lectura mientras no me lea el libro del colegio. Es horrible, el cap estuvo muy corto, pero la inspiración no me llegaba y ahí está lo que salió. Intentaré colocarme las pilas con el colegio para normalizar y leer y escribir, escribir y leer. Abrazos :)

Mi chico perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora