Este no es mi Styles (L.S)

Oh, Gemma

Despertó por la alarma de su celular y la apagó antes de que siga haciendo estragos en su cabeza. Haciendo un recuento de lo que debía hacer esa mañana soltó un gruñido, tomó una toalla y se dirigió descalza hasta el baño al fondo del pasillo, el cual estaba a casi un metro y medio de su habitación.

Al estar a pocos segundos de entrar a la ducha se quedó viendo en el espejo, acto que hacía seguido, cuidando que todo se mantuviese como la última vez, era necesario que así fuera.

Conforme con su análisis, prosiguió a quedar bajo la lluvia artificial para limpiar todo su cuerpo con absoluta concentración hasta llegar a su cabello y solo entonces cerró los ojos con calma dándose pequeños masajes que sabría que iba a necesitar para su día.

Acomodó su cabello para no estorbar su vista y se permitió volver a ver las paredes de su ducha para cerrar las llaves, escuchó un tono de llamada personalizado y, al reconocerlo, corrió la cortina de golpe para tomar su móvil, logrando en el medio taparse vagamente con la toalla. Luego de desesperantes segundos de no poder responder debido a sus dedos mojados, los secó con rápidos movimientos en la tela que la cubría, hecho esto pudo por fin contestar con la respiración algo agitada por su apuro.

-Buenos días, señor.

-Siempre me respondes igual, cariño -le respondió divertido el joven al otro lado de la línea.

-Eres mi jefe, me enseñaron a respetar un poco aunque te cueste creerlo -enrolló su cabello como pudo con un dedo y lo dejó caer en su espalda sin molestarse en mirarlo pues su vista estaba en su ropero y sus pies se dirigían hacia allí.

Escuchó una risa- Soy más que eso también, aunque te cueste creerlo, Gemma.

-Lo sé -trató de ocultar su pesar y al parecer, lo logró- ¿Necesita algo en especial llamándome tan temprano?

-Tantas chicas deseando que su novio las llame en las mañanas y tú te quejas.

-Sabes que tengo mucho que hacer en las mañanas y--

-Lo sé, lo sé -la interrumpió algo hastiado-. Atendiendo a tu dichoso hermanito mimado q--

-No metas a Harry en esto -se escuchaba el tono amenazador en su voz.

-... Que aún no tengo el placer de conocer -la ignoró.

-Louis, ya hablamos de esto -respondió con simpleza poniéndose sus bragas luego de dejar la llamada en altavoz.

-Siendo tu pareja creo que deberías presentarme a tu familia.

-Harry sabe de ti -se puso la falda-, tú sabes de él -secó su pecho para colocarse el sujetador-, no sé tú pero eso para mí es suficiente.

-No para el tiempo que llevamos juntos. Tú conoces a mi familia.

-Un honor que creo que debí rechazar -habló con sorna abotonando su blusa blanca.

-Tampoco es que hayas sido muy amable.

-Louis, no creo que ser tu novia por contrato y que me hayas presentado sólo porque tu madre quería que tuvieras pareja sean buenas razones para ser educada.

-Es un buen contrato -casi podía ver su sonrisa de orgullo-. Tienes lo que necesitas y yo, lo que quiero. Encima te complazco los caprichos.

-Dudo que pedir un horario matinal para poder seguir estudiando y cuidando a mi hermano sea un mero capricho -ya había quitado el altavoz para escucharlo mejor.

-Depende de a quién le preguntes, querida.

Sin importarle más el precio a pagar, colgó y después de guardar el celular en su bolsillo procedió a ponerse la toalla en el cabello para revolver todo secándolo más rápido.