Estas Loco! Tate Langdon Primer Libro

1

Me eh mudado de casa.Antes vivía en otra zona de los Ángeles.No se entre tantas casas se les ocurrió estar en una donde cuentan una peculiar leyenda.

Mis padres son famosos por ser amantes de lo extravagante en realidad ellos le toman mucha más atención a las demás cosas que a mí.

Así que podría decirse que tengo baja autoestima gracias a eso.Llegue a esta casa  hace unos dias.No me da bueba pinta.

Las clases comienzan en unos minutos.Entro al salón cabizbaja no quiero que nadie me note.

Yo quiero pasar desaparecida.Pero eso no sucede.El maestro dice mi nombre cuando estaba escabulliendome entre los demás.

—Fernanda pasa a presentarte los demás sientense—

—Maldita sea—Murmuro para que no me escuche

—Bien entonces Fernanda dinos tu nombre completo y por qué te cambiaste—

—Mi nombre es Fernanda—

—Mas alto por favor—Cuando el profesor dice eso aprieto los puños de enojo.

—Mi nombre es Fernanda Orozco y vine acá por qué me quedaba cerca—Me dirijo al único banco desocupado.

Alado de este hay un chico que se ve sumido en sus pensamientos.Mirando fijamente a un chico.

No veo nada raro en el chico.Mi compañero agita su lápiz rápidamente.Y su mirada se va haciendo sombría.

Durante todo el tiempo está haci yo no lo molestaría de no ser que debemos de hacer una maqueta con el compañero de alado.

Y como no lo veo concentrado pues...Le hablo finalmente.

—Estas bien?—Es lo único que se me ocurre decir.

—Que quieres—Dice aún sin voltearme a ver.

—Yo no te hablaría pero hay que hacer una maqueta y no sé para qué te explico si no me estás dando un puto minuto de tu tiempo—

—Si te escuché y está bien a qué horas te veo—

—No lo se cuando puedes—

—Puedo en la tarde—

—Bien ya no te molesto—

Se voltea dándome la espalda.Las clases terminan y tomo mis cosas.Ya no soportaba un maldito segundo más haci.

Agarro mi mochila y salgo de el salón.El que estaba alado mío me dice algo pero no tengo tiempo.

Corro rápidamente al primer baño que encuentro.Me encierro en un baño y sacó mi navaja.

Lamentablemente me gusta cortarme sé que está mal muy mal pero no puedo controlarlo soy haci.

La puerta se abre y la cierro rápidamente.Pero la persona de el otro lado tiene más fuerza que yo.

—Dejame pasar—Yo forcejeo con la puerta.Hasta que ya no puedo más y se me resbala una mano.

Al ver que no tengo escapatoria decido ocultar mis manos.

—Que estabas haciendo—

—Nada—Piso la navaja para ocultarla.Toma bruscamente mis muñecas.

—Hijo de—Tomo impulso y lo hablo para que me suelte pero es en vano mi intento.

Le doy una patada en donde más le duele y me suelta.

—Nos vemos en la tarde—Tomo mi mochila y la navaja rápidamente.Salgo de ahí corriendo.

Me dirijo a mi casa.Al entrar no puedo evitar sentir un escalofrío el ambiente es muy espeluznante.

Supe que en esta casa ya han pasado tres tragedias una de un doctor loco otra de una pareja gay.

Por último la de Violet una chica que era hija de un cicologo.Todos ellos murieron.

Y aún no se sabe quién a matado a todas esas familias todo apunta a que debe ser alguien muy astuto.

Sacó esos pensamientos de mi mente.Al llegar mis padres siguen fascinados con este espantoso lugar.

No me di cuenta de que me quedé dormida.Siento algo frío en mi mano.Ya es más de la hora en la que acordamos.

Hice la tarea y me quedé dormida seguramente.Me paro bruscamente de la cama.