The psycho/Dylmas

2-I am

Dylan:

Estoy en esta institución mental desde hace cinco meses ya que me transfirieron de otra, como si eso fuera a evitar que haga problemas por favor, es ridículo, aunque últimamente no los e hecho...

Paso de una institución a otra desde los diez años y tengo diecisiete así que si, llevo un largo tiempo en esto. Literalmente no tengo familia, se olvidaron de mi luego de lo qué pasó pero tengo una tía que se niega a dejarme solo, para su familia no fue tan difícil ¿cual es su problema?

Pero también hay algo, o mejor dicho alguien que me hace mantenerme en calma de cierta forma, algo que no me pasaba desde hace un largo tiempo. Se que observarlo durante varios largos minutos desde la oscuridad del jardín de la institución mientras él esta sentado en esa banca tan tranquilo como siempre, con su hermoso cabello rubio siendo despeinado por el viento y esa hermosa piel pálida que brilla con el sol no es una gran idea, pero ¿saben que? Dicen que este lugar es el infierno, pero si él es parte no me importaría quemarme.

Se que su nombre es Thomas, tal vez sea un año o dos menor que yo. Acompaña a su madre a cada terapia hace un año, si aquí los chismes corren como el oxigeno. No me e acercado a él, me gusta observarlo desde que lo vi por primera vez, eso fue luego de un mes de ingresar aquí donde mi único propósito era causar más problemas y lograr que me cambien pero lo único que e hecho es observarlo, no tengo mucho trato con la gente desde hace años, no quiero asustarlo y que se aleje..

Así que lo hice, me acerque y según yo y mi moral no me presente tan mal ¿verdad? Digo, no salio corriendo y por más que una parte de mi quería que lo hiciera la otra estaba tirando fuegos artificiales al momento que volteo a verme y esa voz, dios, creo que nunca me alegre tanto de que alguien preguntara quien era y yo no quisiera partirle la cara.

Por supuesto ya esa era otra historia de la cual él no tendría porque saber. Nunca.

-Dylan.

-¿Aparte de zorra entrometida no te enseñaron modales Rosa?

-Primero no me faltes el respeto y segundo conozco tu récord. ¿Que crees que hacías hablando con el hijo de una paciente? ¿Acaso te volviste loco?

-Primero, hago lo que quiero y segundo, sigo haciendo lo que quiero así que porque no vuelves tu culo a la recepción y dejas de jugar a la doctora. Se buena ¿si?

Y sin más le cerré la puerta de la habitación en la cara.

No voy a tolerar que alguien como ella o cualquier otra persona de esta institución me diga con quien puedo y no puedo hablar. Si le quiero hablar al pequeño rubio es lo que haré.

Gracias a quienes leen >3

Me di cuenta que aunque lo edite no lo puedo hacer más largo ya que la historia de Dylan se va dando de a poco en la historia.