Recuerdo perfectamente aquella tarde cuando me escribiste que querías verme y deprisa contesté-cuando y donde- y no tardaste en decirme-en el lugar de siempre y ahora, por favor- mentí para lograr salir de la casa y fui a nuestro lugar feliz, en medio de aquellos escalones donde sentíamos que sólo éramos tú y yo en el planeta; mientras esperaba tu llegada pensaba en -que dirá cuando me vea; estoy lo suficientemente bonita para el; y si no le gusta mi estilo de hoy; y si no se cómo mirarlo, saludarlo o se me olvida cómo besar- puras boberías, pero al verte descender por aquel estrecho pasillo hecho de escalones sentía que mi alma se congelaba y que podías ver a través de ella, tus ojos me quemaban la piel y tus manos; mmm Dios tus manos tan suaves que al tocarme provocaban el gemido más desgraciado que mi alma a podido desprender jamás; entonces sin mediar palabras me besaste y podía sentir el calor de tu cuerpo junto al mío y por unos minutos olvidar que no eras mío, junto a ese calor tu fuerza incontrolable que me hacia querer romper tu camisa y devorarte hasta quedarnos sin aliento... entonces me invitaste al 2do piso y pasamos a la oficina en construcción que estaba en frente de la tuya y ahí me pegaste a la pared y me besaste tan fuerte que podía sentir como desprendías un pedacito de mi alma a través de mis labios, y fue ahí cuando me atreví a llegar más allá que un beso y liberar la bestia que llevo por dentro y accedí a tu pecho y lo besé lentamente empezando por tu boca mientras iba descendiendo gemías para mi y al llegar a tu pantalón no me di cuenta en el momento que lo desabroché y fue ahí donde me di cuenta que no había marcha atrás, lo tomé entre mis labios y lo lamí y luego lo hice mío tal como ha sido todo este tiempo, sabes de quien estoy hablando 😉. Luego me diste la vuelta y subiste mi falda y al rozar la yema de tus dedos en mis piernas se erizaba mi piel, así como ahora al recordar ese momento; y casi rompes mi ropa interior mientras devorabas mi cuello con tus suaves labios y cuando menos lo esperé... penetraste cada centímetro de mi ser uniéndonos en uno solo hasta quedar sin aliento y sin palabras para expresar esa pasión que existió en ese momento y que está intacta hasta la fecha...